Agricultores de Colombia piden al gobierno no poner iva a la canasta familiar



El Gobierno Nacional radicó el proyecto de ley de la reforma tributaria que establece un IVA del 18% para los productos de la canasta básica familiar, aun a pesar de los cuestionamientos y las críticas de varios sectores.



La Sociedad de Agricultores de Colombia insistió en que entiende la difícil situación de recursos del Gobierno, pero pide que se busquen otras soluciones. El presidente de Fenavi, Gonzalo Moreno, dijo que es “inconcebible que el Gobierno busque afectar la seguridad alimentaria”.


“Es inconcebible que el Gobierno afecte la seguridad alimentaria gravando los productos de la canasta básica. El Iva a la canasta familiar es regresivo. La Corte ha dicho que solamente se puede en la medida en que se devuelva, pero si incluso esa devolución no va a ser suficiente para compensar a las personas de menos recursos por el esfuerzo que están haciendo, esto podría ser incluso inconstitucional. Además, el proyecto de ley dice que esa devolución va a ser solo para quienes ganen menos de $250.000 al mes”, argumentó.

Todos los representantes del sector agropecuario están en contra del gravamen de los productos con el 18% inicialmente, y luego con el 17% desde el 2020 al 2022.

El presidente de PorkColombia, Jorge Alfredo Ostos, dijo que el consumo de carne de cerdo en Colombia con este proyecto aprobado se va a caer en un 12%. "60.000 toneladas de carne de cerdo en Colombia no van a estar disponibles porque este gravamen afecta a los hogares. El mensaje al Congreso es que no toque la canasta básica familiar porque eso es una medida traída de los cabellos. Lo que se está gravando es la seguridad alimentaria”, insistió.

Agregó que, aunque en campaña el Gobierno manejaba un lenguaje “consecuente”, en la administración se encontraron con una realidad difícil, pero que no puede ser remediada con una medida como la que está prevista en el proyecto.

El presidente de la SAC, Jorge Enrique Bedoya, dijo también que en política se puede entender que a veces las cosas que se dicen no son las que se hacen. “Pero una cosa es eso y otra meterse con la comida de los colombianos y en particular con la de los más pobres”, puntualizó.


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