Según expertos, está cifra está relacionada
directamente con la alta permisividad de los padres de familia. Muchos creen
que sus hijos no toman o que tal vez hacerlo en el ambiente familiar no es tan
malo, pero en realidad tiene graves repercusiones.
El alcohol es una sustancia psicoactiva lícita y según
la más reciente encuesta del Ministerio de Salud, de los colombianos
consultados, 9 de cada 10 dijeron que si habían consumido licor alguna vez. En
el último año lo hicieron 6 de cada 10, y en el último mes 4 de cada 10.
¿Pero cuáles son los riesgos de una conducta que se ha
normalizado en la sociedad? Según la doctora Ana María Peñuela, “la afectación
del alcohol no es solamente individual sino también familiar y social (…) hay
una pérdida del involucramiento parental, hay una desestructuración de la
familia”.
Por su parte, Augusto Pérez, director de Nuevos
Rumbos, manifiesta que “el problema del alcohol en Colombia es un problema muy
serio, porque aunque a nivel internacional no tenemos un consumo tan elevado
como Alemania, Francia, Italia o EE. UU., lo que tenemos es una concentración
de muy grande de consumo abusivo en los fines de semana”.
Algunos de los efectos físicos del consumo abusivo
están relacionados con daños en el hígado, enfermedades gastrointestinales o
neurológicas. En términos de salud mental, se pueden presentar síntomas de
ansiedad o depresión.
Esto, a juicio de los expertos, significa que estamos
ante la sustancia psicoactiva más consumida en el país con mayor consumo en los
estratos altos, pero con mayores repercusiones sociales en los estratos más
bajos y con gran impacto en los jóvenes.
El 99.9% de quienes consumen drogas han empezado por
alcohol.
Tomado de Noticias Caracol