La joven se fue de
viaje, confiada en que había dejado a su perrita en manos profesionales, pero
al regresar se la entregaron muerta y envuelta en una bolsa.
Kirsten Kinch relató
la historia sobre la muerte de su mascota Nova en una sentida publicación de
Instagram.
Dejó a su Husky en el
internado especializado P&E Boarding Kennels para que la atendieran
mientras ella se iba de viaje a Islandia con su familia.
Antes de irse les
contó que la mascota había pasado recientemente por un problema de colitis y
les entregó los medicamentos con la instrucción de las dosis que le debían
suministrar para lograr su recuperación.
Kinch dice que les dio
varias indicaciones escritas y verbales para evitar errores en la
suministración del medicamento, pero cuando volvió se encontró con una
situación que calificó como desgarradora.
Relata que el día que
llegó de Islandia salió directamente desde el aeropuerto para la guardería y al
preguntar por Nova le respondieron que se había muerto. Al parecer, la
encontraron ensangrentada en su jaula esa mañana.
“Quedamos impactados
y, más allá, devastados por esto. Habíamos dejado una perra sana en los tres
días anteriores”, afirma la joven en la publicación.
Después, los
enfermeros le entregaron el cuerpo de la Husky envuelto en una bolsa negra
recubierta con cinta adhesiva.
“No había cuidado ni
empatía en la forma en que había sido tratada. Fue absolutamente traumático y
desgarrador irnos con ella así”, expresó.
Kirsten dice que ha
enviado correos y mensajes a P&E solicitando información sobre el
comportamiento de Nova y la medicación, pero la guardería no se ha contactado
con ella aún.