La cantante estadounidense Britney
Spears está ingresada en una clínica de salud mental por la angustia
que le ha provocado la enfermedad de su padre, según reveló este miércoles el
medio especializado en famosos TMZ.
Spears, de 37 años, ingresó a la clínica la semana pasada y
está previsto que se quede ahí un mes, según las fuentes consultadas por 'TMZ',
que indicaron que el estado de la cantante "es serio y no
mejora".
El origen de su angustia está en los problemas de salud de su padre, Jamie
Spears, que ha sido sometido a dos operaciones para solucionar complicaciones
en el intestino y el colon.
La cantante compartió una imagen en la red social Instagram
con el texto "Enamórate de cuidar de tu mente, cuerpo y espíritu".
Acompañado a la imagen, comentó: "Todos necesitamos tomarnos
tiempo para un poco de 'tiempo para mi'".
La pareja sentimental de Spears, Sam Asghari, compartió la misma imagen que la
cantante y dijo: "Esto no es debilidad, es fortaleza. La gente solo
debería estar inspirada con esto, al menos yo lo estoy".
Los problemas de salud de su padre ya provocaron que en
enero la cantante suspendiese de forma "indefinida" todas sus
actuaciones.
Spears tenía previsto empezar en febrero su segundo espectáculo permanente en
Las Vegas, "Britney: Domination", que estaba programado hasta agosto
y con el que según People, se iba a embolsar medio millón de dólares por
actuación.
"Voy a dedicar mi atención y energía a cuidar de mi familia. Tenemos una
relación muy especial y quiero estar con mi familia en estos momentos de la
misma forma que ellos han estado conmigo siempre", dijo Spears, que reveló
que su padre "estuvo a punto de morir".
El padre de Spears tuvo un importante rol en los momentos más duros de la vida
de la cantante asumiendo su tutela cuando en 2008 fue ingresada en un
psiquiátrico y perdió la custodia de sus hijos.