El
Parque Natural Regional Cerro Páramo de Miraflores, primera área protegida
declarada en el Huila, es considerada una joya natural del departamento.
Este
complejo natural que hoy cumplió 15 años de haber sido declarado como área
protegida, une a los departamentos de Huila y Caquetá, y cuenta con una
extensión de 31.647 hectáreas con jurisdicción en los municipios de Garzón,
Gigante y Algeciras.
El
Páramo de Miraflores considerado uno de los escenarios naturales más
importantes de la región, fue declarado por la Corporación Autónoma Regional
del Alto Magdalena-CAM como Parque Natural Regional “Rigoberto Urriago” desde
el año 2005, categoría que le permite estar blindada del desarrollo de
cualquier actividad minera, energética y agropecuaria.
“De
las 31.647 hectáreas del Parque Natural, 26.453 hectáreas están destinadas a la
preservación, donde se encuentran ecosistemas de bosque subandino, andino, alto
andino y páramo; 4.591 hectáreas son para la restauración y 602 hectáreas son
de uso público para el desarrollo sostenible del ecoturismo”, explicó Camilo
Augusto Agudelo Perdomo, director de la CAM.
Biodiversidad
El
Páramo de Miraflores es el hábitat y refugio de una gran variedad de especies
tanto de flora como de fauna, propios de este tipo de ecosistemas, allí se
registraron un total de 210 especies halladas en la primera expedición
científica realizada para conocer la biodiversidad de esta área protegida, que
incluyó el estudio de vertebrados de los grupos de anfibios, aves, mamíferos y
flora.
El
Cerro Páramo de Miraflores cuenta con al menos 18 familias botánicas y 63
géneros en las propias zonas de vida del Bosque alto andino, matorrales y
frailejones. Así mismo, se registraron
122 especies de vertebrados, correspondiente a 15 especies de anfibios propios
de ecosistemas de páramo, se tiene registro de al menos 85 especies de aves,
entre las que se encuentran especies amenazadas como el Águila Real de Montaña.
En
este parque natural se ha reportado la presencia de 22 especies de mamíferos,
de las cuales tres especies de roedores son endémicas para el territorio
nacional. Se destaca también la
presencia de cuatro especies de mamíferos en categoría de amenaza, entre ellos
el Oso de Anteojos y el Tigrillo.
Recurso
hídrico
En
la zona del Páramo Miraflores se encuentran una gran laguna donde nacen las
microcuencas río Loro y La Guandinosa del municipio de Gigante. De allí brota
también la quebrada La Honda que abastece al casco urbano de Gigante.
En
esta área nace de igual forma la quebrada Agua Negra del municipio de
Algeciras, de la que se deriva el riego para los cultivos de la despensa
agrícola del Huila y se abastecen los acueductos veredales.
Por
el lado de Garzón, nacen las quebradas La Majo, las Damas y Garzón, las cuales surten de agua a los acueductos
regionales, veredales y los distritos de riego para las actividades
agropecuarias de la región. Adicional a ello, la quebrada Garzón abastece el
acueducto urbano de la capital diocesana del Huila.
Participación
comunitaria
La
participación comunitaria ha sido fundamental para garantizar la protección y
conservación del páramo de Miraflores, de allí la importancia de las
organizaciones sociales del centro del departamento como los grupos ecológicos
y asociativos, ambientalistas, juntas administradoras de acueductos, grupos de
monitoreo, entre otros liderazgos que ha emprendido una férrea defensa por este
escenario natural.