Edisson Dussán Rojas fue condenado a 34 años y siete meses de cárcel tras ser hallado culpable del asesinato de su pareja, , quien se encontraba en su cuarto mes de embarazo.
La mujer, de
22 años, murió a finales de marzo pasado debido a varios golpes que le propinó
su pareja en la cabeza. La agresión ocurrió en su vivienda ubicada en el
asentamiento Granjas Comunitarias, de la capital huilense.
El dictamen
médico señala que falleció por trauma craneoencefálico severo por golpes
ocasionados con objeto contundente. Sufrió cinco fracturas.
El hombre Pretendió
ocultar su crimen al enterrarla en un hueco que él mismo cavó, tras la ausencia
de la joven familiares y vecinos decidieron instaurar la denuncia y en una
visita a su casa los investigadores fueron alertados por la presencia de tierra
en el patio de la vivienda, realizaron una excavación de inmediato y
encontraron el cuerpo de la joven, el cual estaba enterrado, semidesnudo, en
estado de descomposición y con golpes en la cabeza.
Lo que llama
la atención de la Policía es que Edisson Dussán no huyó y, por el contrario, lo
hallaron en la casa en donde confesó que la había asesinado a golpes. Por el
estado de descomposición del cuerpo, las autoridades creen que el asesinato
habría ocurrido tres días antes del hallazgo.
El hombre
fue capturado y acusado de feminicidio agravado, pero tras un preacuerdo con
las autoridades, en el que confesó pormenores de los hechos y se declaró
culpable, su pena fue rebajada a 34 años y siete meses que comenzó a purgar en
la cárcel de Rivera, Huila.
Según las
investigaciones, durante los años de convivencia, Dussán Rojas le causaba todo
tipo de violencia a su compañera. De la unión de la pareja queda una hija menor
de edad, pero Cindy tenía dos hijos más que convivían con ella.