Al día de hoy y debido a la gravedad que ha causado el cáncer, Andrés Felipe tuvo que tomar la muy difícil decisión de que una de sus piernas fuera amputada siendo consciente que eso significaría un cambio extremo en su vida y más aún, en la música como baterista.
Apasionado
por las notas musicales, con un gran sentido del humor, y muy sencillo, así es
Andrés Felipe Rojas, un joven laboyano de 18 años de edad que hoy tiene como
meta cumplir su sueño en la música pese a las adversidades que han acontecido en
su vida y los retos ha tenido que afrontar en su salud a su corta edad.
Fue en
agosto del 2020 el momento en el que, para Andrés Felipe, cambió todo. Un
diagnóstico de cáncer temprano fue detectado en su cuerpo, obligando a dejar de
lado sus estudios, amigos y su principal pasión, la música. La orden médica
daba cuenta que la enfermedad estaba comenzando y por tal motivo, él, junto a
su mamá, la señora Gladys Rojas, debían dirigirse hacia la ciudad de Bogotá
para recibir una atención médica especializada, ya que infortunadamente, los
esfuerzos de los galenos en los centros asistenciales locales no eran
suficientes para dar batalla a dicha afección en su salud que además daba
cabida a sentimientos de angustia y temor por posibles complicaciones.
Ese mismo
mes, a finales, Andrés Felipe y su mamá llegaron a la capital, con una limitada
capacidad económica y con las esperanzas puestas en Dios en que las
intervenciones médicas darían resultado en poco tiempo. No obstante, luego de
un par de meses y una serie de controles, se frustraba el anhelo de que Andrés
regresara pronto debido a que las complicaciones aumentaron a tal punto que su
alimentación tuvo que dar un giro de 180 grados. Al final de ese año, Andrés
continuó estable, pero problemas financieros y una pérdida de un ser querido
dieron pie a un nuevo escenario de preocupación.
En meses
posteriores, Andrés Felipe tuvo que afrontar una de las situaciones que él
mismo describe como una de las más difíciles de su vida; y esa fue una
intervención quirúrgica en sus pulmones a causa de la enfermedad cancerígena.
Acto seguido, tuvo que permanecer internado en un delicado estado de salud,
mientras que su madre, Gladys Rojas, se levantaba cada día con su fe a seguir
afrontando una realidad indescriptible, con serias limitaciones económicas, en
una ajetreada ciudad con un ritmo de vida que solo era soportable gracias a la
sonrisa de su hijo.
En este
complicado trayecto varias personas se han solidarizado con Andrés y su
familia; para otros en cambio ha pasado como imperceptible; sin embargo, para
Gladys Rojas, la evolución de su hijo lo es todo y verlo cumplir su sueño es su
gran anhelo. Para ello, Andrés Felipe
debe continuar en un proceso de rehabilitación que tiende a tardar alrededor de
5 años y de momento, carece una prótesis especial para tener una mejor calidad
de vida y volver a caminar.
Su familia,
amigos, allegados y gente de buen corazón se han sumado a este propósito, y es
así como este 18 de septiembre desde las 2:00pm y en el marco de la
"Semana de la Juventud" se llevará a cabo un concierto solidario en
la Concha Acústica de Pitalito, con el objetivo de reunir fondos para financiar
esta prótesis que ronda unos 40 millones de pesos.
La
invitación es para todos los laboyanos y habitantes del sur del Huila,
empresarios, comerciantes, líderes, políticos, fundaciones e instituciones, a que
se sumen a esta bonita causa y poder contribuir a que Andrés Felipe, con su
gran valentía, carisma y anhelo, que lo caracteriza, cumpla su sueño de salir
adelante de esta situación, volver a caminar y de esta manera ser ese gran
artista que anhela ser.