'Chente' y
'Cuquita' estuvieron juntos nada menos que 58 años, algo inusual en el mundo de
la farándula, donde la brevedad de las relaciones parece ser la constante. La
historia del idilio, parece de novela.
El romance
de Vicente Fernández y María del Refugio Abarca se remonta a 1963, cuando murió
la madre del artista y este decidió volver a su terruño, Huentitán el Alto. Fue
allí cuando conoció a la mujer que lo acompañaría el resto de su vida. Según
contaba el artista, desde el primer momento quedó prendado de ella.
La buena
noticia le llegó al cantante cuando se enteró que 'Cuquita' era hermana de uno
de sus mejores amigos. Después de contenerse por meses, Vicente Fernández
decidió abordarla a la salida de una misa y le regaló una flor. Ese mismo día
le declaró su amor y le pidió que fueran novios.
Sin embargo,
la relación tuvo dificultades debido a los constantes desplazamientos del
'Charro de Huentitán 'para presentarse en varias partes de México. Esta
situación supuso una crisis para la pareja, que se separó. 'Cuquita' tenía un
nuevo novio, pero Vicente Fernández le dio un ultimátum: le pidió que lo dejara
y se casaran.
La boda, muy
sobria y con pocos invitados, fue el 27 de diciembre de 1963.
"Si
volviera a nacer, me casaría con la misma mujer y tendría los mismos
hijos", dijo el artista al cumplir sus bodas de oro.
Fruto del
amor, la comprensión y la dedicación, la pareja alcanzó casi seis décadas
juntos. Tuvieron cuatro hijos: Vicente Jr., Alejandro, Gerardo y Alejandra, así
como 11 nietos, tres bisnietos y otro en camino.
A lo largo
de su relación, 'Doña Cuquita' se convirtió en el sostén de la familia y en un
apoyo para Vicente Fernández. La solidez de la relación le dio al artista un
fundamento clave para su proyección y éxito.
En redes
sociales Vicente Fernández siempre tuvo un espacio para rendir homenaje a su
esposa:
