La confrontación deja hasta el momento un subintendente de la
Policía sin vida identificado como Ricardo Arley Monroy, oriundo de la ciudad de Neiva, quien recién estaba trasladado
al Caquetá y pertenecía al Esmad. El uniformado recibió un disparo de fusil en
medio de la manifestación.
En medio de la grave situación de orden público, los
manifestantes quemaron parte de las instalaciones de la compañía petrolera.
Se habla de dos uniformados del Esmad Neiva que han muerto y
un civil más.
La protesta que protagonizan miles de habitantes de las zonas
rurales de los límites de Caquetá y Meta comenzó a finales del mes de enero,
las comunidades campesinas están exigiendo que la compañía Emerald Energy
invierta un millón de dólares en obras para la población entre otras
peticiones.
Tomado de: Huila stéreo