Omaira, la pequeña que fue víctima del desastre natural ocurrido en Armero, una de las tragedias más devastadoras del país, podría ser declarada santa por el papa Francisco, pues creyentes señalan que la menor les ha concedido milagros.
En junio de
este año, el pontífice recibió una carta mientras estaba hospitalizado para
reconocer a la niña que se convirtió en un símbolo de esta tragedia después de
estar atrapada entre el lodo y restos de su propia casa por tres días después
de la erupción del Nevado del Ruiz en 1985.
Natalia
Bernal, una reconocida abogada colombiana, es quien ha estado más interesada en
la beatificación de la menor. De hecho, ella le hizo llegar una carta de
petición al papa, en la cual expresaba que Omaira debería ser considerada
santa.
La mujer le
entregó la misiva al papa Francisco cuando él se encontraba en un centro médico
después de presentar varios problemas de salud, noticia que tuvo reconocimiento
a nivel mundial.
“No había un
sistema de seguridad para impedirnos entrar al hospital. Nadie nos preguntó.
Subimos al décimo piso donde fue la cirugía del papa”, dice la creyente antes
de entregar detalles del contenido de la carta que le hizo llegar al papa
Francisco”, dijo la mujer a la citada revista.
En ese mismo
momento entendí que Dios abrió caminos para que esa noche pudiéramos entrar con
facilidad, no hay otra explicación
La mujer
entró a la sala personal del santo padre y dice que la misiva fue recibida por
un hombre de confianza del Vaticano.
“Días
después, le dieron de alta al papa y mucha gente estaba allá, fue necesario que
acordonaran el lugar, en ese mismo momento entendí que Dios abrió caminos para
que esa noche pudiéramos entrar con facilidad, no hay otra explicación”, contó.
¿Qué dice la
carta?
La abogada
le contó en la carta el padecimiento que vivió la niña y los milagros que se
han cumplido a través de la menor.
“Recordemos
que los milagros y bendiciones provienen solamente del amor y de la
misericordia de Dios. Omaira tan solo es un instrumento. No deseo hacer todo
este trámite de beatificación para que se rinda culto a Omaira y se le
atribuyan a ella milagros”, dijo la abogada a Semana.
Y agregó:
“El Señor tiene en cuenta el sacrificio de Omaira y el ofrecimiento de su vida
para que se salven muchas vidas humanas y muchas almas se acerquen a Dios.
Mucha gente frecuenta la tumba de Omaira y muchos hacen brujería y espiritismo
allí, lo que buscamos es que se construya con el tiempo una iglesia o una
capilla y la beatificación nos ayudará”.
El 13 de
noviembre de 1985, 29.000 vidas fueron sorprendidas por el devastador golpe de
la naturaleza. 20.000 personas murieron tras la avalancha ocasionada por la
erupción del Nevado del Ruiz. Sin embargo, la cara de la tragedia fue Omaira,
una pequeña que sufrió hasta sus últimas horas de vida.
El mundo fue
testigo del padecimiento que vivió la menor antes de morir y aunque los equipos
de rescate miraron todas las formas para sacar a la pequeña del lugar en el que
estaba atrapada, sus esfuerzos fueron en vano.
La niña, de
13 años, seguía alentando a los rescatistas para que continuaran con su
trabajo. Desde entonces, el sitio donde falleció la pequeña empezó a ser
visitado por miles de personas, quienes empezaron favores y milagros.
Poco a poco,
este lugar se volvió un sitio de peregrinación.
Tomado de EL
TIEMPO