En el marco de la feria empresarial Exposur, en Pitalito se llevó a cabo una mesa de trabajo sobre el espinoso camino hacia la construcción de la paz y el pos conflicto, este foro tuvo panelistas tan importantes como el presidente de Confecámaras, el promotor de la iniciativa Yo Soy Capaz, víctimas del conflicto y actores regionales.
Mientras en Cuba se sigue la cúpula de las Farc, continua negociando con el gobierno nacional y entrevistándose con las víctimas, debatiendo los acuerdos finales con los cuales se pretende poner fin a una guerra que a la fecha ay va para los sesenta años, siendo uno de los conflictos internos más viejos del mundo con miles de muertos, heridos, miles de millones en pérdidas, consecuencias socioculturales imborrables que han quedado plasmada en la memoria de la víctimas, quienes han perdido un padre, un abuelo, algún amigo o ellos mismos han sido objeto de la violencia.
Hablaron las víctimas
En este contexto, desde Pitalito, en una de las mesas académicas del Exposur, se han pronunciado voces que hablan con propiedad del tema en este país, algunos de ellos han vivido en carne propia y han pagado con sangre el costo de la guerra, como lo es el empresario caqueteño Cesar Augusto Montealegre, quien llegó desde Florencia para narrar el escalofriante relato de su secuestro, pero a la vez de cómo logró perdonar y convertirse en ejemplo nacional de reconciliación.
“yo fui uno de los mayores generadores de empleo en el Caquetá, alcance a tener 275 empleos directos, eran 10 negocios, hoy en día no contamos sino con uno precisamente por los hechos victimizantes de los que fui objeto, desde el año 1976 pagábamos vacuna, fui secuestrado, me obligaron a cavar mi propia tumba amenazando con matarme, ahora esas personas que me atacaron, que me agredieron hoy trabajan conmigo, eso es la paz, la paz no es la que se firma en La Habana, la paz empieza por nosotros, los que hemos sido afectados por el síndrome de la violencia para poder perdonar, cuando nosotros perdonamos estamos automáticamente reconciliándonos con nuestros victimarios, la paz empieza por el perdón eso es lo básico para que toda sociedad pueda salir a delante”, declaró el comerciante.
Pitalito por su ubicación geográfica recibe diariamente población desplazada de Cauca, Putumayo y Caquetá, actualmente se cuentan en este municipio más de 23 mil personas registradas en la unidad de victimas, lo que convierte a este municipio en uno de los mayores receptores de esta población en el país, como vocero de ellos asistió a la mesa de paz en Miguel Rojas Cerón, representante legal de la Asociación de Desplazados Internos (ASDI) fundada hace 13 años en el valle de laboyos.
“Venimos desde el barrio Altos del Magdalena, que es fundado por 150 familias víctimas de la violencia, somos ejemplo a nivel nacional porque hemos demostrado que la paz es muy importante para nuestro futuro, por eso venimos trabajando por la reintegración de los muchachos que se han reinsertado, es decir estamos trabajando víctimas con victimarios, estamos cosechando futuro desde el presente, por eso participamos en este espacio tan vital para este sufrido proceso”, indicó el vocero de ASDI.
Mensajes de paz
Desde la ciudad de Cali, llegó a Pitalito Fani Torres Granda, en representación de la fundación de la fundación Paz y Bien en el distrito de Aguablanca, donde se trabaja un exitoso modelo de justicia restaurativa, apuntó, “en temas de pos conflicto, la justicia restaurativa juega un papel importante, esto es construir procesos desde el ofensor y el ofendido para lograr procesos de perdón y que eso se mantenga en el tiempo, es decir que sea un perdón verdadero, estos espacios permiten a los ciudadanos tomar conciencia y empezar a pensarnos, pensar que aporto yo, no que aporto como empresario, como profesional, como estudiante, que estoy aportando para la paz”. dijo la profesional.
Una de las ponencias estuvo a cargo del creador de la campaña Yo Soy Capaz, Marc De Beaufort quien dijo en uno de los apartes de su intervención, “la paz es algo demasiado importante para dejarlo en manos de los políticos, si la sociedad no se apropia del tema vamos a seguir en conflicto, es muy importante venir a Pitalito, porque la paz la construyen también los que vivieron la guerra, que hacemos en las ciudades como Bogotá, Medellín o Cali dando lora, cuando es aquí en esta región donde se sufrió el conflicto, el mensaje que deja mi campaña es que los colombianos están muy aburrido y quieren pasar la página, pero no sabemos como , por eso tenemos que arrebatarle la palara a los políticos y dársela a la sociedad”, declaró el ponente.
Julián Domínguez Rivera, presidente de Confecámaras, también tuvo participación en esta mesa de paz, habló desde la perspectiva comercial y su aporte para este proceso, “debemos reflexionar como comerciantes y empresarios sobre a que le apostamos, si es la polarización del país, si definitivamente es hacer oposición irracional a los procesos o es de manera definitiva darnos la oportunidad de una paz que cada vez está más cerca, pero no habrá paz si no logramos desarmar el resentimiento de esas tragedias individuales que todos y cada uno de nosotros llevamos dentro, el amigo secuestrado , el familiar en el ejercito que fue asesinado, en este sur occidente sí que ha ocurrido, sabemos lo que es padecer la violencia pero eso mismo nos debe la capacidad de poder alcanzar la paz, cada uno debe hacer su introspección para poder avanzar, hay que entender las oportunidades que vienen en estos procesos”, apuntó el director de Confecámaras en Pitalito.
Luis Alfredo Ortiz Tovar, laboyano, rector de la Universidad Cooperativa, dio una de las conclusiones más interesante al afirmar, “lo que se necesita es la reconciliación, hemos escuchado testimonios contundentes, entendemos que este país no todos están comprometidos y debería ser así, este ejercicio que hace el gremio empresarial permite abrir puertas, así es posible la reconciliación independientemente de la corriente política a la que pertenezcamos, la gente piensa es que aquí va a haber impunidad, lo que va haber es otro tipo de justicia, para eso se necesita un conocimiento más profundo, para eso estamos generando espacios para hablar de paz en los colegios en las universidades, aquí en el Huila esto ya se está haciendo, la cultura de la paz, debe ser de todos”, concluyó diciendo el ponente.