Desde el día de ayer en el parque principal del corregimiento de
Bruselas, está el señor Jorge Papamija de la vereda El palmar de Criollos, haciendo
huelga de hambre, que según indica el campesino, no dejará de hacer, así está
la lleve hasta la muerte.
Las causas que lo llevaron a tomar estas medidas desesperadas, fueron la
posibilidad de perder su finca; según indicó el señor Papamija en el año 1990
compró un terreno en la vereda antes mencionada, sin embargo, y por no tener la
edad mayoritaria y no tener cédula de ciudadanía no pudo registrar el documento
que lo acredita como propietario a su nombre, por lo cual, su mamá registró la
propiedad y aparece como dueña del predio. Adicional a esto, la señora firmó un
documento en el cual asegura que el dueño de la propiedad es su hijo, y que
ella solamente figura como propietaria porque en ese entonces el joven o era
menor de edad.
El problema, después de la muerte de la señora, según indica el manifestante, es que sus hermanos aseguran que la finca era de su madre por lo
cual, el terreno les pertenece a todos.
El día de mañana se llevará a cabo la primera audiencia, no obstante, el
señor Jorge Papamija manifiesta que no permitirá que sus hermanos le quiten su
tierra.
A esta hora, el corregidor Andres Figueroa y la personera María Eugenia
Herrera, hablan con el hombre para tratar de persuadirlo de llegar a estas
acciones.
Este hombre, se habría enterrado meses atrás por el mismo problema.