Durante dos
días se realizó en Pitalito un recorrido por el interior de la cárcel, actividad
liderada por Inpec, quien invitó a los estudiantes de varias instituciones educativas
para presentarles el programa “Delinquir no paga”, una estrategia pedagógica
que busca generar conciencia sobre las consecuencias que tiene vivir en la
ilegalidad.
Es así como
niños de la Winnipeg y Montessory de
Pitalito, Oporapa, Saladoblanco y otros municipios pudieron vivenciar el
proceso de ingreso a un penal, observar la forma como viven los reclusos a través
de un completo recorrido.
De acuerdo
con el abogado Camilo Andrés Gómez, director del penal en Pitalito, la
experiencia para unos fue más dura que otros, sin embargo se logró recrear el vínculo
familiar a través de la recuperación de
valores, ello a través del acompañamiento profesional de psicólogos y
trabajadores sociales que estuvieron al tanto de la actividad.
Algunos de
los internos compartieron sus experiencias con los menores, asesorados por
pasantes el Universidad Minuto de Dios, por lo que el recorrido fue
enriquecedor tanto para los menores como para el personal del Inpec que
organizó la actividad.