Efectivos
adscritos al Modelo Nacional de Vigilancia Comunitaria por Cuadrantes de la
Policía Nacional, detuvieron a dos mujeres quienes fueron presentadas ante las
autoridades judiciales por su presunta participación en un hecho punible
registrado en el área rural del municipio de Rivera.
El
hecho delictivo se presentó en zona rural del municipio de Rivera, en donde dos
mujeres arribaron a bordo de una motocicleta a una tienda ubicada en la vereda
El Guadual, y con una arma de fogueo intimidaron a su propietario despojándolo
del dinero del producido por la venta del día.
Una
vez la comunidad alertan mediante línea telefónica sobre lo sucedido, integrantes
del cuadrante 1 de la Estación de Policía Rivera se desplazan hacia el lugar de
los hechos, logrando interceptar sobre la vía de la Vereda El Guadual – Vereda
LA Ulloa a las presuntas facinerosas, quienes son detenidas por las
autoridades.
En
efecto a las capturadas se les halló en su poder $110 mil pesos en efectivo
hurtados momentos antes a la victima propietaria de la tienda, además se les
encontró el arma de fogueo con el cual perpetraron el ilícito.
Se
trata de la incautación de una pistola de fogueo marca Bruni con cañón
modificado para munición calibre 9 milímetros junto con un proveedor y cuatro
cartuchos para la misma; de igual manera se les incautó un teléfono celular con
en cual se comunicaban las detenidas.
Asimismo
las autoridades inmovilizaron la motocicleta marca Yamaha FZ-150 color negra,
de placas ARR-97E, la cual fue utilizada por las facinerosas para efectuar el
hurto.
Como
Liliana Carolina Mejía Leiva, de 19 años de edad, natural de Bogotá y Norma
Ricaute Olaya, de 25 años de edad, natural de Neiva, ambas residente en los
barrios Santa Lucía del Corregimiento El Caguán, fueron identificadas las dos
mujeres capturadas por los efectivos policiales.
Las
dos capturadas, dinero recuperado, arma de fogueo y motocicleta inmovilizada,
fueron puestas a disposición de la Fiscalía 10 Local de Neiva, por el delito de
hurto, posteriormente en audiencia de control de garantías fueron cobijadas con
medida privativa de la libertad domiciliaria, desde donde continuarán
afrontando los cargos penales que se les imputan.