Cinco años atrás fue demolida de manera total una antigua casona que sirvió como sede del ICA en el municipio de Pitalito, debido a que se encontraba en total abandono convirtiéndose en sitio para que pernoctaran habitantes de calle y consumidores de alucinógenos; incluso fue motel para algunas parejas que no tenían dinero para ir a un sitio adecuado con el fin de consumar su relación.
La Fiscalía desistió de su proyecto, el lote continúa abandonado; aunque hubo una propuesta desde el Ministerio de Justicia, en el gobierno de Juan Manuel Santos para una potencial construcción de la denominada "Casa de la Justicia"; tampoco prosperó por falta de recursos. Por lo que este lote ha sido un gran dolor de cabeza para el gobierno local.
Hasta el momento, no se conoce qué uso darán a este espacio que es propiedad municipal.
Además, el lugar era la guarida ideal para los ladrones que se refugiaban en la noche a fin de asaltar a las personas que se desplazaban hacia los barrios del noroccidente de la ciudad. Esta situación fue denunciada por dirigentes comunales y finalmente en 2013; el gobierno municipal de la época, a través del secretario de Gobierno Jorge Enrique Motta determinó su demolición. Además ; presentó un proyecto de acuerdo al concejo para ceder el terreno a la Fiscalía General de la Nación con el fin de construirse en este lugar una sede propia para el ente investigador en Pitalito. La propuesta fue aprobada mediante el acuerdo municipal 045 de 2013 y se pretendía erradicar cualquier foco de inseguridad en la zona.
El tiempo pasó y la construcción no se concretó. Incluso; hubo otro acuerdo municipal aprobado, el 054 de 2015 en el cual se hizo modificación al de 2013 para fijar un plazo a la Fiscalía hasta Diciembre de 2016 para que efectuara la construcción para su sede o de lo contrario lo entregara al municipio, el propietario original del lote.
Incluso; la misma demolición de la antigua fue controvertida por presuntas reclamaciones de propiedad que finalmente fueron aclaradas demostrando que el titular primario, en realidad era el municipio de Pitalito y no un particular.
Al finalizar 2016, el lote pasó nuevamente bajo tutela del municipio de Pitalito, por incapacidad de la Fiscalía para gestionar recursos a fin de tener su propia sede. El lote abandonado no tiene cerramiento; constituyéndose en un problema para las personas que cruzan en las noches porque no mejoró la situación de seguridad en Sucre, Guaduales y otros barrios del sector; debido a que aún existe evidencia sobre consumo de alucinógenos por parte de habitantes de calle.
Hasta el momento, no se conoce qué uso darán a este espacio que es propiedad municipal.