Desde la E.S.E. Manuel Castro Tovar, dentro de la
estrategia “Ser para servir” del programa de Humanización, se realizó la campaña
“Donación para la vida” la cual benefició a tres familias de usuarios de
escasos recursos económicos del municipio de Pitalito, a quienes se les brindó
apoyo con mercados y elementos acordes a las necesidades de estas familias.
En la vereda Villas de San Roque a unos 30 minutos del casco urbano de
Pitalito, se realizó la visita a la familia de María Helena Ortiz Yagüe, una
humilde mujer campesina de 36 años, madre de 3 hijos; hace casi 4 años adquirió
toxoplasmosis y al parecer, le desencadenó una parálisis total en su cuerpo,
incluyendo la pérdida del habla; tras la muerte de su esposo hace casi un año,
es su progenitora la señora Ana Yagüe quien ahora se hace cargo de ella. En el
caso de María además de los mercados se le obsequió un teclado de computador,
para poder comunicarse y una silla de ruedas donada por el gerente de la
entidad, Sergio Mauricio Zúñiga Ramírez, para que sus familiares puedan
movilizarla.
Otra de las familias visitadas fue la de los hermanos
Cerón Ojeda en el barrio Lara Bonilla, quienes además de vivir una difícil
situación económica, deben lidiar con varios problemas de salud que padece
Gladis de 46 años, como diabetes, retención de líquidos y parálisis corporal,
entre otros a causa de la poliomelitis. Ellos viven de vender helados, pero
cada día resulta más difícil trabajar, porque Gladis requiere con más
frecuencia cuidados de salud y su hermano quien nunca la ha desamparado debe
estar más pendiente de ella y a la vez encargarse de su alimentación especial.
Haciendo otro desplazamiento a la zona rural, el quipo
de la E.S.E. Manuel Castro Tovar llegó hasta la vereda El Macal, donde
encontraron a dos hermanos con un corazón muy grande, tanto, que sin nadie
pedírselo adoptaron a José Israel Estrada, un abuelito que deambulaba solo
buscando quién le arrendara una habitación, pero ellos a cambio de eso, le
ofrecieron un techo, un lugar dónde dormir, alimento y el cariño ya no le dan
sus hijos, por si fuera poco se encargan de llevarlo al médico y estar
pendiente de su tratamiento para que el abuelito, pueda tener una mejor calidad
de vida, esa capacidad de ofrecer tanto a un desconocido y teniendo poco, hizo
que fuera una de las familias seleccionadas, para llevar las ayudas de la
Empresa Social de Estado, gerenciada por el Dr. Sergio Mauricio Zúñiga Ramírez.