La pequeña Peyton Shields fue atacada por el escualo en una de sus
piernas y una mano, la semana pasada en el condado de St. Johns, Florida (EE.
UU.).
Peyton tuvo que ser trasladada de
Crescent Beach a un hospital de la zona, donde le dieron 40 puntos de sutura.
Los padres de la niña se hallaban en la playa cuando oyeron los gritos
de su hija y pensaron que se
trataba de una medusa que le había picado en el agua, pero pronto vieron la
sangre y comprendieron que se trataba de algo más grave.
“Salía sangre de su mano y
comencé a decir ‘¿qué está pasando?’, y, al salir ella del agua, vi que salía
mucha más sangre de la mitad inferior de sus piernas”, contó el padre, Steve
Shields.