"Me veo de 5 o 6 años. Estoy en un cuarto de la
casa de mi abuela paterna, en un barrio muy popular de Cali. A mi lado, un
hermano de mi papá, que para esa época era un adulto. Yo estaba parada; él, en
cuclillas –aun así era más alto que yo–. Mi cuerpo pequeño estaba inmóvil:
recuerdo claramente que mi corazón latía desbocado de terror, mis ojos no eran
capaces de mirarlo de frente, estaban clavados en la puerta. No podía gritar,
ni llorar, ni salir corriendo; estaba dominada". Así comienza Vicky Dávila
su columna "A mí también me pasó", publicada en la Revista Semana.
Dávila cuenta que "todavía me siento extraña
reconociéndolo, y por primera vez soy capaz de contarlo públicamente". La
periodista revela su historia de abuso sexual, enmarcándola en el debate
nacional sobre la cadena perpetua para los violadores de menores, que están
pidiendo distintos sectores políticos en el país, incluyendo el presidente Iván
Duque.
En su relato, Dávila cuenta: "No sé cuánto tiempo
duró ese horror, pero hoy, 40 años después, me parece oír la respiración
agitada del tío. Qué asco me produce ese recuerdo y, a la vez, qué dolor.
Siento rabia de no haberme podido defender". Y agrega que cuando ocurrió
el terrible hecho tendría 5 o 6 años. "Me hubiera encantado tener la edad,
la madurez y el valor para contárselo a mi papá, quien se murió sin saberlo; o
a mi mamá, para que lo hubiera denunciado ante la justicia", reveló.
Vicky Dávila cuestiona en su columna el hecho de que
Medicina Legal solo incluya en sus registros los casos de abuso denunciados, ya
que muchos no entran en las estadísticas producto del silencio debido al miedo.
Y sostiene que el Estado ha fracasado en sus políticas que tienen que ver con
la protección a menores. "Aun cuando las penas han aumentado, la impunidad
es la mejor aliada de los agresores", dice.
Cierra su columna exhortando al presidente Duque a que
proponga la cadena perpetua para violadores y asesinos de menores: "...no
desfallezca, presidente Duque, por los niños y niñas de Colombia...".
Tomado de El Tiempo