Las primeras informaciones indican
que la exsenadora Aida Merlano asistió
a una cita médica en una clínica al norte de la ciudad, en compañía de un
guardia y un conductor, pero se habría fugado a la salida del centro
asistencial.
Los custodios estaban aguardando que la cita odontólogica de
Merlano concluyera pero se llevaron una gran sorpresa al ver salir del
consultorio al odontólogo, quien no dio mayor explicación sobre la mujer. Los
hechos ocurrieron en un tercer piso. Los agentes del Inpec ingresaron al consultorio y no encontraron a Merlano por
ninguna parte.
De inmediato dieron aviso, e
hicieron una búsqueda más detallada. Fue cuando encontraron una ventana interna
que conectaba esa tercera planta con el primer piso. La gran sorpresa fue
cuando observaron que desde la ventana pendía una cuerda. La búsqueda urgente
se ordenó.
Las pesquizas indican que Merlano
descendió por la cuerda y abajo contó con la asistencia de un motorizado que la
sacó de la zona. Las autoridades están indagando otros detalles con el
odontólogo que estuvo con ella. Así mismo, los guardia que tenía a cargo su
vigilancia están preparando un informe sobre la espectacular fuga de Aida
Merlano.
Aunque los hechos tuvieron lugar
en horas de la mañana, el Inpec solo
hacia las cuatro de la tarde dio aviso público a través de un trino en su
cuenta en Twitter.
Merlano había sido recientemente
condenada a 15 años de cárcel por la Corte Suprema de Justicia como responsable
del caso de corrupción electoral más grande de la costa. Como se recuerda, su
sede de campaña "La casa blanca" fue allanda y en el lugar
encontraron miles de cédulas, fajos de dinero y planillas de votantes a los que
la campaña habría comprado sus votos.
Tras esto la parlamentaria fue
capturada y el caso derivó en su condena. La política permanecía en la cárcel
el Buen Pastor y sus salidas a chequeos médicos eran recurrentes ya que sufría
cuadros depresivos agudos e incluso intentos de suidicio. Ahora las autoridades
se preguntan si todo no hacía parte de un plan milimétrico que de entrada deja
en ridículo al Inpec al tiempo que significa una burla a la justicia.