Luego de que las autoridades conocieran del robo del cadáver de Eduardo Morales Trujillo, del
cementerio del municipio de Gigante, desplegaron un operativo con el fin de
encontrar los despojos mortales.
El cuerpo fue encontrado en un precipicio en la parte posterior
del cementerio.
Uniformados de la Policía acudieron al lugar para acordonar la
zona, a la espera de uniformados del cuerpo Técnico de Investigación,
encargados de realizar el levantamiento, para su posterior análisis.
Una de las hipótesis del lamentable hecho, sería una manera de
presionar a sus familiares, al parecer para que no denuncien los asesinos, ya
que habrían sido identificado por un hermano de la víctima, quien meses atrás
fue herido de gravedad.
Las autoridades, no descartan un ajuste de cuentas, toda vez que
el hermano del fallecido ya fue agredido al parecer por los mismos hombres que
asesinaron a Eduardo.
Luego de recolectar pruebas para el esclarecimiento de este
hecho nunca antes visto en este municipio, el cuerpo de Morales Trujillo fue entregado nuevamente a sus familiares, quienes
le dieron cristiana sepultura a su ser a espera que esta vez sí pueda Descansar En Paz.