La
Secretaría de Seguridad de la Ciudad de México confirmó en un mensaje en su
cuenta oficial de Twitter que junto con la Policía de Investigación logró
determinar la identidad de la presunta responsable de sustraer a la menor del
centro escolar, además de ubicar un domicilio de la alcaldía de Xochimilco,
donde pudo haber estado la mujer con la menor.
La
dependencia informó que las autoridades llegaron a revisar este domicilio situado en la colonia
San Felipe, Xochimilco, donde encontrado la ropa que usaba la mujer cuando se
llevó a la niña y algunos cinchos de plástico con sangre.
Las autoridades ofrecieron una
recompensa de 2 millones de pesos (107.642 dólares) a quien aporte información
para localizar a la mujer, que tiene entre 42 y 45 años de edad, con una
estatura de entre 1,55 y 1,60 metros.
Alrededor de 15.000 volantes con un
retrato robot de la sospechosa fueron distribuidos en las estaciones del metro
y en la comunidad de Tulyehualco para que las personas puedan brindar
información sobre esta persona.
Además, la fiscal capitalina, Ernestina Godoy, confirmó que la necropsia revelaba abuso
sexual.
La última vez que se vio con vida a
la niña de 7 años fue el pasado 11 de febrero. Cuando su madre llegó 20 minutos
tarde a recogerla al colegio, ya se la había llevado la mujer que identificaron
las autoridades.
La Fiscalía
General de Justicia de la Ciudad de México investiga el caso de Fátima como un
feminicidio y se mantienen abiertas indagatorias sobre la posible omisión de
responsabilidad de funcionarios que pudieron haber incurrido en negligencia.
Cientos de vecinos llegaron a la
casa de la niña para participar en su sepelio, que comenzó con una misa de
cuerpo presente para continuar con la exhumación en un cementerio cercano.
El cortejo fúnebre comenzó tras la
misa acompañado de mariachis y globos blancos y se paró un momento ante la
fachada de la escuela, donde varias personas gritaron consignas contra la
maestra que dejó salir a la niña sin su madre.
El crimen contra la menor se
conoció en plena ola de indignación por el asesinato de Ingrid Escamilla hace
unos diez días, quien fue descuartizada por su pareja, el cual desencadenó
tensas movilizaciones en la capital.