El Titanic regresará al mar: la
compañía Blue Star Line construirá
una réplica, la cual buscará recorrer la ruta del Atlántico Norte en 2022.
Un magnate australiano se ha propuesto revivir el Titanic y su idea es ponerlo a
navegar dentro de dos años. Se trata de una réplica exacta (mismo tamaño,
arquitectura, distribución por clases, camarotes y servicios) del que fue en su
momento el barco más grande del mundo, pero con la tecnología y la seguridad
del siglo XXI.
Pero lo más llamativo es que se
intentará recrear la escena original del primer Titanic: para ello, los
pasajeros recibirán en el momento de embarcar un kit con ropa al estilo de
1912. El Titanic II, construido por Blue
Star Line reproducirá todos los detalles estéticos del original, incluido
el interior.
Sin embargo, estará equipado con
tecnología de vanguardia para la navegación y la seguridad, y habrá botes
salvavidas para 3000 personas, a diferencia del mítico barco que tenía botes para 1200 pasajeros.
El
nuevo Titanic, que costará unos 500 millones de dólares, pretende ser una moderna réplica
del original: contará con la clásica escalinata, una pileta y saunas en sus
nueve cubiertas, que acogerán a pasajeros de primera, segunda y tercera clase.
Su capacidad será igual al del
modelo original: 2.400 personas,
divididas en tres clases, y 900
tripulantes. Por ahora se desconocen los precios de los billetes, pero
visto el alcance del proyecto, todo indica que será una experiencia exclusiva
en todas sus clases.
Reino
Unido y Estados Unidos firmaron un tratado histórico por el que se establece
que serán protectores de los restos del ‘Titanic’. En el 2003 Reino Unido firmó el tratado
y en noviembre último fue ratificado para incorporar al país norteamericano.
Desde ahora, ambas naciones tendrán
ahora el poder de conceder o denegar licencias que autoricen la entrada a los
restos del gigante trasatlántico o la retirada de los artefactos u objetos
encontrados fuera del casco.