Juan David Leóngomez, psicólogo colombiano, fue galardonado con el premio ‘Nobel de lo absurdo’ en la categoría de economía por su investigación ‘Inequidad en el Ingreso Nacional Predice la Variación Cultural de los Besos Boca a Boca’, la cual evidencia el nivel de inequidad en los países con la cantidad de besos que se dan sus habitantes.
Aunque suene
absurdo, la investigación fue publicada el 30 de abril de 2019 en la
prestigiosa revista Scientific Reports.
Un aspecto
clave en la investigación de la que hizo parte Leóngomez es que querían
averiguar por qué los humanos son la única especie en el mundo que se da besos.
Ante esto,
una de las hipótesis del estudio sugiere que los besos en ambientes hostiles,
como el de los humanos, acrecienta las relaciones monogámicas. Por lo tanto,
afecta directamente en la calidad de una relación romántica.
La primera
de estas hipótesis dice que los besos son un mecanismo para evaluar la
"calidad" de la pareja de acuerdo con el entorno, bien sea que este
es más o menos saludable que otros.
La segunda
plantea que los besos aumentan la monogamia o la inversión en relaciones de
pareja en términos de tiempo, fidelidad y cuidado parental, entre otras, razón
por la cual adquieren un mayor valor en entornos hostiles, como en los que los
recursos son escasos en términos relativos o absolutos. Es decir, pobreza o
inequidad.
Así, los
besos y caricias podrían jugar un papel importante en cómo las parejas
mantienen y controlan la calidad de una relación romántica.
Tras
encuestar a más de tres mil personas en trece países, los investigadores
hicieron interesantes hallazgos, como que los besos se valoran más en las
relaciones ya establecidas que durante el cortejo, así como que las personas
abrazan más a su pareja en las naciones más pobres o más saludables
Pero la
investigación no se limitó a aspectos meramente cuantitativos, sino que también
se atrevió a lanzar conclusiones cualitativas, o sobre la calidad de los besos.
En el caso
de Colombia, los investigadores encontraron que, junto con Chile y Brasil, es
el país donde las personas reportan una mayor frecuencia de besos. Además,
después de Polonia, es la nación en la que los habitantes se dan más abrazos.
Asimismo,
Colombia es el país con mayor satisfacción con la frecuencia de las relaciones
sexuales.
Sobre el premio Nobel que recibió, y cuya ceremonia de entrega fue transmitida por internet el pasado 17 de septiembre (este año, por la pandemia, no se pudo llevar a cabo como tradicionalmente se hacía desde el Teatro Sanders, de la Universidad de Harvard), el investigador dice que no es motivo de vergüenza.