Paso a paso los animales van ocupando un lugar de respeto. En Antioquia,
uno de los departamentos más importantes del país, se lleva a cabo la campaña
‘Adopta un caballo, transforma una vida’, una iniciativa incluida en el plan de
desarrollo del territorio entre los años 2020 y 2023.
Con esta nueva estrategia, el gobierno busca recrear lo que ya se vivió
en Medellín, la ciudad cumbre: las familias que tengan su sustento en
carretillas guiadas por estos animalitos, podrán entregarlos para cambiarlos
por vehículos de tracción mecánica y, así mismo, los caballitos rescatados
podrán ser adoptados por familias que les brinden una buena vida.
Colombia ha luchado fuertemente con este tipo de maltrato animal al ser
común su uso para acarrear objetos de todo tipo, en especial en ambientes de
bajos recursos. Muchos de los animalitos expuestos a estas situaciones tienen
graves secuelas de desnutrición y problemas corporales por el peso extremo al
que son sometidos, sin embargo, tal como lo explican los que incentivan la
campaña, muchas veces no es por corazones malintencionados.
Antioquia tiene 535 vehículos de tracción animal, caballos que no la
están pasando bien, no necesariamente por un maltrato intencionados de la
familia sino que históricamente han visto esos animales como herramienta de
trabajo. – Mencionó Carlos Ignacio Uribe, secretario de ambiente que lidera el
proyecto.
Aunque las grandes ciudades se han librado de este lamentable hecho, las
poblaciones o municipios más pequeños todavía son testigos de un acto que
indigna a gran parte de la población y que, además, es uno de los temas más
importantes en la agenda ambiental de cada uno de los departamentos, por eso,
Antioquia ha decidido empezar a implementar esta iniciativa donde se espera que
al menos 360 caballos puedan ser adoptados en un periodo de dos años.
El plan empezó en agosto cuando la secretaría de ambiente se puso de
acuerdo con el corregimiento de Currulao, en el municipio de Turbo, para que 42
caballos sean entregados por sus dueños a cambio de recibir, antes de finalizar
el año, un vehículo de tracción que reemplace la labor que cumplían los
equinos.
En todo el proceso hay una doble participación: no solo los dueños de
estos animalitos podrán liberarlos de sus cargas, también habrá un espacio
abierto para que los caballos sean adoptados con la condición de un espacio
amplio para su tenencia y sin trabajos forzados. Para comprobarlo, un equipo
hará seguimiento y se impondrán multas a las personas que incumplan con las
condiciones.
Por otro lado, las personas que obtengan el beneficio del vehículo,
también tendrán garantizado las mejoras de las vías de ser necesario para que
puedan impulsar sus propios negocios, además, los municipios y corregimientos
que participen en estos años, empezarán a prohibir los vehículos de tracción
animal en sus territorios.
Si tú te encuentras en Antioquia y estás interesado en adoptar a uno de
estos equinos puedes hacer la solicitud por medio del correo
adoptauncaballo@antioquia.gov.co que la alcaldía dispuso para este fin.
Cada vez más cerca de ver a los caballitos como siempre merecen estar:
libres y sin ataduras. Muy bien hecho, Antioquia.
Fuentes: El Espectador