A diferencia de otras veces, cuando el proyecto de prohibición de las corridas se ha discutido en la Comisión Séptima del Congreso, este lunes comienza un nuevo trámite de una iniciativa que comulga con el mismo sentido. Esta vez, el intento se hará desde la Comisión Primera de la Cámara, que debate sobre asuntos constitucionales.
Además de la prohibición de las corridas, el Gobierno tendrá seis meses
para acompañar los procesos de reconversión económica de quienes se dedican a
esta actividad. Así mismo, deroga la Ley 916 de 2004, que es con la que se
reglamentó la actividad taurina.
“Ya reconocimos que los animales sienten y merecen protección especial,
ahora no podemos desconocer el derecho más básico de todos, que es el de la
vida. Basta de la violencia contra los animales. No más corridas de toros”,
escribió el representante liberales Juan Carlos Losada, autor del proyecto y
uno de los más visibles abanderados en el tema.
El recinto en el que discutirán hoy fue intervenido con letreros que
llaman a los miembros de la Comisión Primera a decirle “no” a las corridas de
toros. Las expectativas son muchas, pues se ha reconocido a esta célula
legislativa como una de avanzada, que aprueba iniciativas progresistas. Siendo
la prohibición de los eventos taurinas una de ellas, como reconoce el propio
Losada y otros compañeros suyos.
De acuerdo con Eduardo Peña, de Animal Defenders International, “la Corte
Constitucional manifiesta que el Congreso debe tomar la palabra y sí puede
prohibir los eventos taurinos. Hay argumentación técnica, científica y
académica que está de nuestro lado y de los toros”.
La Corte también ha manifestado que “la cultura se transforma y revalúa
constantemente en el marco de las mentalidades y de los imaginarios de una
civilización para adecuarse a la evolución de la humanidad, la realización de
los derechos y el cumplimiento de los deberes, más cuando se busca desterrar
rastros de una sociedad violenta que ha impuesto categorías de marginalización
y dominación de determinados individuos o colectivos. Erradicar la
subalternidad hacia los animales se constituye en un claro y preciso derrotero
de la sociedad actual” (Sentencia C-041 de 2017).
Desde hace diez hasta la fecha, se han presentado por lo menos siete
proyectos para abolir las corridas de toros. Uno de ellos fue radicado por el
gobierno de Juan Manuel Santos, que pasó exitosamente el primer y segundo
debate en la Cámara, sin embargo, por falta de trámite se hundió en el Senado.
En 2019, cuando se discutía la iniciativa en Comisión Séptima de Cámara,
un defensor de las corridas abogó para que se acaben las corridas de toros por
ley natural, pues hay muchas personas que viven de esta actividad: “Nos dicen
que nuestra actividad algún día no puede continuar y debemos de buscar
capacitaciones en el SENA de no sé qué o que el Ministerio del Trabajo nos
brinde algún empleo ajeno al nuestro, después de habernos dedicados por 15, 20
o 30 años a esto. Y no solo como toreros, también como mayorales de finca,
picadores de toros o subalternos. Eso es absurdo. Es nuestra pasión, nuestra
forma de ganarnos la vida y llegar a hacer este cambio psicológicamente también
nos afectaría”, manifestó Nicolás de San Juan, torero y gestor de educación
taurina.
Fuente: EL ESPECTADOR