El pasado 14 de junio se inauguró el 'Monumento a la Resistencia'. Este se encuentra ubicado en el sector de Puerto Rellena, en el oriente de Cali.
La
escultura, compuesta por una mano que abraza un cartel en el que aparece la
palabra 'Resiste', es el monumento a la resistencia de los manifestantes de la
capital vallecaucana durante más de dos meses del paro nacional, el cual
comenzó el pasado 28 de abril.
En él se
plasmaron los rostros de muchos de los manifestantes muertos en el marco de las
protestas.
Recientemente
se desató una polémica en torno a la estructura de cerca de 10 metros de
altura, ya que distintos concejales insisten en que se debe tumbar debido a
que, según ellos, no cumple la normatividad.
De igual
manera, tras la intervención de la Fuerza Pública el pasado sábado 26 de junio,
que permitió el desbloqueo de la zona, el comandante de la Policía afirmó que
estaban esperando poder desmontarlo. Para esto se debe revocar el acto
administrativo que permitió la construcción.
Sin embargo,
el alcalde de Cali, Jorge Iván Ospina, asegura que no tumbará ni destruirá el
'Monumento a la Resistencia' durante su administración pues este está lleno de
fuerza simbólica de los jóvenes y "no le hace daño a nadie", dijo a
'Caracol Radio'.
"Quiero
dejar claro que el Monumento de Resistencia en la Simón Bolívar no será
destruido o retirado por nuestra Alcaldía , todo su cuidado y proyección futura
se hará en concertación con sus promotores y quiero agradecer a todos los que
posibilitaron la reapertura de la vía", escribió en su cuenta de Twitter.
No obstante,
sí dejó abierta la posibilidad de trasladarlo - sin señalar a dónde - tras
realizar una negociación con los jóvenes de la Unión de Resistencias de Cali
(URC).
"Las
sociedades evolucionan, hay aquí una manifestación popular de un monumento, que
no debe ser destruido, máximo debe ser trasladado a un sitio donde no tenga una
dificultad futura; pero yo particularmente no me siento arrepentido de
posibilitar que los jóvenes lo hayan desarrollado”, aseguró el mandatario
caleño este martes 29 de junio, añadiendo que "si llegáramos a necesitar
ese espacio como corredor del MÍO, construiríamos con ellos un acuerdo
negociado".
Recordemos
que la escultura fue construida durante diez días por jóvenes que hacen parte
de la llamada primera línea, quienes contaron con el apoyo y la asesoría de
constructores, ingenieros y la comunidad.
Hoy no hay
una licencia ni un auto administrativo para legalizar ese monumento
Ahora bien,
el concejal de Cali Juan Martin Bravo se
mantiene en que el monumento debería ser retirado ya que, según él, no cumple
con la normatividad y va en contravía del POT.
“El alcalde
Ospina le debe una explicación a la ciudadanía. Si él dice que no va a tumbar
el monumento, debe de contar también si cuenta con la licencia de intervención
y ocupación del espacio público. Hoy no hay una licencia ni un auto
administrativo para legalizar ese monumento”, afirmó en dialogo con 'Blu Radio'.
También
aseguró que la escultura fue construida en una zona peatonal y que, por
consiguiente "va contra lo que es el espacio público. Ni siquiera cuenta
con una franja protectora de 160 metros, que debe de tener para que transeúntes
no corran un riesgo”.
Fuente: EL
TIEMPO