Zaid quedó con secuelas tras un incendio. Algunas se ven a simple vista en su piel. Sin embargo, logró vencer todas las barreras impuestas que no le daban muchos años de vida. ¿Decían que viviría poco? Bueno, ya tiene 18 años y se alista para seguir estudiando.
¿Cuál es su
historia?
Zaid García
tenía dos años de edad. Vivía con su mamá, Otaida Carrillo, en México, junto a
una comunidad indígena.
Una noche
dormía tranquilamente en su cuna cuando, de un momento a otro, el lugar se
incendió. La familia había dejado una vela prendida. Esta cayó y lo primero que
encontró a su paso fue la cobija en la que Zaid se arropaba.
“Cuando me
vean espero que piensen que no soy un zombie o algún horrible sujeto que podría
herir a las personas”, relata Zaid, con ahora 18 años, en un video de la
organización ‘SBSK’.
La llama le
dejó el cuerpo con 80 por ciento de quemaduras. Lo trasladaron en avión a un
hospital de San Antonio, Texas, para que recibiera un mejor tratamiento médico.
“En el
hospital, el doctor decía que no lo iba a lograr, no iba a vivir por muchos
años. Gracias a Dios está aquí echándole ganas”, recuerda su madre Otaida
Aunque el
futuro del pequeño no tenía muchas esperanzas, superó todos los obstáculos.
Tuvo algunos
sacrificios: le amputaron las manos y algunos dedos. Estuvo tantas veces en el
quirófano que ya ni las recuerda. Su piel tiene decenas de injertos, es decir,
le extrajeron parches de piel sana para suplir las áreas con quemaduras.
Otras
secuelas
Zaid quedó
ciego. Los médicos tomaron la decisión de cerrar sus ojos debido a la grave
afectación. Sin embargo, están ahí debajo de la piel y tiene la seguridad de
que algún día los podrá abrir de nuevo, probablemente como producto de una
nueva operación.
“Cuando
visito a los oftalmólogos, ellos me dicen: ‘Tú tienes tres posibilidades. Una
de ellas es que puedas ver como una persona normal, la segunda es que tengas
visión deteriorada o, la tercera, que no veas nada’”, menciona Zaid.
Su nariz
también sufrió las consecuencias. Es muy pequeña, aunque aún puede percibir
olores.
Con las
manos amputadas no podía comer con facilidad y necesitaba alguien que le
brindara los alimentos. Gracias a una modificación especial, ahora tiene
tenedores y cucharas para utilizar.
“Me siento
cómodo con lo que soy. Empecé a aprender que no me debería sentir mal, me debo
levantar, porque si no lo hago, ¿quién va a hacerlo por mí?”, sostiene.
A pesar de
las caídas y los malos pensamientos que rondaban su cabeza, encontró el apoyo
fundamental en la Escuela para Ciegos y Deficientes Visuales de Texas.
“Siento que
soy como su mentor. Alguien al que le puede preguntar lo que sea y siempre le
diré la verdad”, comenta para la organización ‘SBSK’ uno de los profesores de
Zaid.
En dicha
escuela compartió con otros niños. Comprendió lo valiosa que es la aceptación
como el primer paso vivir de la mejor forma.
“Espero que
la gente se enfoque en lo de adentro, no en la apariencia externa, porque a
veces puede estar equivocada”, puntualizó.
Ayuda
económica
Los
tratamientos médicos de Zaid tienen un costo muy elevado.
Ante la
atención que necesitaba, su mamá decidió radicarse con él en Texas, Estados
Unidos.
La
organización ‘Special Books by Special Kids’ (SBSK), bajo el liderazgo de
Christopher Ulmer, promovió, en 2019, una recolección de fondos.
Cuanto más
recaudemos, más atención y cuidado recibirá en el futuro
Por medio de
la plataforma ‘GoFundMe’, Zaid rompió récords: la meta inicial eran 50 mil
dólares, pero en algo más de una hora se sobrepasó ese monto.
“Es mucho
para nosotros, nunca esperaba todo eso”, dijo su madre Otaida ante la avalancha
de mensajes y donaciones.
Jared Leto,
actor ganador de premios Óscar y músico, aportó 5 mil dólares a la causa.
La acogida
fue tan grande que, hasta hoy, Zaid ha recaudado medio millón de dólares para
costear los gastos de sus procedimientos y terapias.
“No habrá
problemas en el futuro en cuanto al tratamiento médico de Zaid. Cuanto más
recaudemos, más atención y cuidado recibirá en el futuro”, comentó Chirstopher
Ulmer.
Cantante y
DJ
Hace algunos
días de este 2021 cumplió 18 años de edad. Ya es un adulto. El bebé a quien le
auguraban escasos años de vida quedó atrás.
Zaid abrió un
canal de YouTube con el nombre de ‘Mexea Wood’. Allí compartió un video de lo
que fue su celebración reciente de cumpleaños.
Después de
cantarle ‘Las mañanitas’, su mamá le desea: “¡Que sigas cumpliendo muchos años
más!”
Así mismo,
ha cantado ‘Siempre en mi mente’ de Juan Gabriel o se ha aventurado por
clásicos en inglés: “Imagine all the people, livin' life in peace”, se oye
cuando interpretó ‘Imagine’ de Jhon Lennon.
Sus sueños
“Habrá cosas
buenas que puedas hacer, por lo tanto, siempre debes valorarte tal como eres.
Siempre mira las cosas positivas que puedes hacer. No pienses en lo negativo,
es probable que algunas veces lo hagas, pero déjalo ir e intenta salir
adelante”, menciona Zaid como lección de vida.
Pronto
ingresará a una escuela pública de Estados Unidos. Está nervioso y emocionado,
pero sabe que será una gran experiencia, pues compartirá con más personas.
Quiere
seguir explorando el canto y le gustaría trabajar como operador de la línea de
emergencias del 911 porque “no quiero que las otras personas sufran lo que yo
he sufrido”.
Al mando del
911 espera salvar vidas.
“Antes diría
que no era nadie, ahora puedo decir ‘Este soy yo, Zaid’”, concluye.
Fuente: EL
TIEMPO