Este lunes Martha Ospina, la directora del Instituto Nacional de Salud, explicó algunas de las cifras que arrojó el estudio de seroprevalencia hecho en 12 ciudades del país.
Ospina aseguró que, según los datos recopilados, el
89% de la población del país, entre asintomáticos y sintomáticos, probablemente
ya tuvo COVID-19. De ese porcentaje, el 53 % fue afectado por la variante Mu.
Sin embargo, aseguró que la variante Delta es una
amenaza real, si se considera que es la de mayor capacidad de transmisión que
conocemos hasta ahora, además, los estudios muestran que Mu ha perdido
participación y Delta está creciendo activamente. Por eso, la experta alertó
que, si un posible “cuarto pico” llega a ocurrir en el país, se debería a
variante Delta.
Para evitar que así sea sugirió “el cumplimiento de
las medidas de protección personal por parte de cada uno y del oportuno y
completo estudio de todos los contactos de cada caso positivo por parte de las
EPS y las secretarías de salud, garantizando las pruebas y el aislamiento,
incluso mientras se espera el resultado de la prueba”.
¿Habrá un fin de la pandemia?
Al respecto, la directora del INS, es optimista.
Asegura que “la epidemia tiene que finalizar y la vida tiene que volver a la
normalidad que conocíamos”, pero es clara en afirmar que en lo que resta del
año seguiremos en pandemia.
Por otro lado, explicó que reiterando que si se
mantiene una velocidad de contagio baja, con gran adherencia a las medidas de
protección como el uso del tapabocas, entre otras, y se mantiene un buen ritmo
de vacunación, cada vez el impacto será menor y “estaremos como hoy pasa con la
influenza, con un virus estacional con un impacto muy bajo en casos y
fallecidos anualmente”.
Fuente: EL TIEMPO