Luego de ser víctima de abuso sexual, la doctora sudafricana, Sonnet Ehlers, diseñó un dispositivo creado para atacar la violencia sexual.
El dispositivo
llamado Rape-axe, ayudaría a prevenir e identificar al agresor, de acuerdo con
los fabricantes.
La doctora
Ehlers explicó que “fue un paciente quien me impulsó a buscar esa respuesta al
principio de mi carrera. Una noche de 1969, estaba atendiendo a una mujer que
acababa de sobrevivir a un ataque cuando me dejó con unas palabras que nunca
olvidaré. Temblando de terror con lágrimas corriendo por su rostro, dijo: Si
tan solo tuviera dientes allí”.
En las
publicaciones, en la red social Instagram, se puede observar que el
preservativo femenino tiene una forma similar a la de un tampón y en su
interior tiene una especie de espinas.
El
artefacto, que debe introducirse en la zona vaginal, es comercializado como un
elemento de defensa personal contra un posible caso de abuso sexual.
“Rape-axe
puede detener la violación incluso si está dominado, atacado por sorpresa,
inconsciente, drogado o dormido”, dice en la descripción de su cuenta de
Instagram.
El
preservativo, además, permitiría identificar al abusador, debido a que el
dispositivo causa heridas agresor dejando rastros de su ADN.