Ante la Comisión Tercera de la Cámara de Representantes se le dio luz verde, en primer debate, a un proyecto de ley que busca la eliminación del impuesto del 4×1.000 en Colombia. A la propuesta le quedan tres debates más en el Congreso.
El tributo, que fue creado en 1998, ha sido calificado
como regresivo e inconveniente para el sistema financiero nacional.
Hay que recordar que incluso Asobancaria, gremio que
reúne a los bancos en Colombia, ya había manifestado su apoyo a eliminar ese
impuesto toda vez que motivaba, por ejemplo, el uso del efectivo en Colombia.
De acuerdo con la iniciativa, el desmonte del impuesto
se daría paulatinamente: en 2023 sería del 3×1.000; en 2024 llegaría al 2×1.000
y en 2025 sería del 1×1.000, para desaparecer definitivamente en 2026.
De acuerdo con el documento que sustenta la propuesta
de ley, el país dejaría de recibir cerca de $8 billones por términos de recaudo
gracias a este impuesto.
Sin embargo, el proyecto de ley también incluye un
nuevo impuesto a ingresos altos en Colombia. Este aplicaría para las personas
que en Colombia tienen un ingreso mensual superior a los $25 millones.
Este impuesto sería de una base del 2 % sobre dichos
ingresos. Aclara el documento sin embargo que la tarifa en personas naturales
sería marginal y progresiva.
Así mismo, se aprobó que el Gobierno Nacional mantenga
un juicioso proyecto de austeridad con miras a seguir recuperando parte de los
$8 billones que se van a dejar de recibir por la eventual aprobación de este
proyecto de ley.