Doris Cumming, una mujer de 82 años de edad, vivía en una
casa de Armuchee, en Georgia, con su nieto Robert Keith Tincher III, un hombre
de 29 años. Tras un tiempo sin saber del paradero de la mujer, la familia
contactó a las autoridades.
En un principio, según ‘Associated Press’, sus familiares
pensaron que Cumming se había mudado y que ya no residía en Georgia. Sin
embargo, alertaron a las autoridades tras creer que podría haber desaparecido o
que algo malo le había ocurrido.
El hallazgo fue aterrador. El cuerpo de Cumming fue
encontrado en bolsas plásticas y dentro de un enorme congelador. Pero cada
investigación de las autoridades reveló más detalles impactantes.
La Policía de Floyd dio a conocer que Cumming fue encerrada
en dicho congelador por su nieto. Al parecer, la mujer sufrió una caída en el
mes de diciembre y su nieto, en lugar de llamar una ambulancia o a las
autoridades, decidió meter el cuerpo de su abuela en el congelador mientras
ella aún estaba viva y seguía respirando.
Según reportó ‘Fox 5’, “Tincher arrastró a la mujer por el
apartamento y escuchó y vio cómo se rompían numerosos huesos”.
Sobre por qué lo hizo, Tincher le dijo a las autoridades que
ya tenía una orden judicial en su contra por amenazas contra su esposa, por lo
que no quiso llamar a la policía.
Además, por temor a ir preso por lo que pudiera pasarle tras
las lesiones que sufrió su abuela, decidió meter su cuerpo en el congelador.
Incluso cuando aún seguía con vida. “Por lo que determinamos, en ese momento,
él creía que ella todavía respiraba y tenía algo de movimiento en el momento en
que la metía en el congelador”, afirmó Brittany Werner, investigadora del
condado de Floyd, a ‘Fox 5’.
Aunque el hombre mantuvo el cuerpo de Cumming en su casa
durante meses sin que nadie se percatara de lo ocurrido, luego decidió mover el
congelador hacia otra ubicación el pasado mes de marzo.
Las alertas de los familiares de la anciana llevaron al
terrible descubrimiento el pasado jueves 14 de abril.
El cuerpo de la mujer de 82 años permanece en criminalística,
en donde buscan determinar la causa y fecha exacta de la muerte de Cumming. Por
su parte, el nieto de la mujer, que afronta tres cargos, permanece en una
cárcel de Rome, Georgia, según informó ‘Associated Press’. Extrañamente,
Tincher afirmó que le duele la muerte de su abuela, pues “era el único miembro
de la familia que le dio la cortesía, el amor y la atención que necesitaba”.
El caso mantiene en vilo a las autoridades, quienes incluso
dijeron creer que estos casos solo ocurrían en la ficción.