Hay una razón, y es que los interesados en presentar un plan
de salvamento, tal como quedó definido en la audiencia pública del pasado 12 de
mayo, no lo hacen, la compañía irá a liquidación definitiva.
Así lo ratificó Billy Escobar Pérez, superintendente de
Sociedades, tras señalar que “ya se vencieron todos los tiempos y es el momento
de decidir el futuro de Justo & Bueno”.
El funcionario también fue enfático en señalar que “no se
admiten más dilaciones ni hay más plazos”, por lo que las propuestas que puedan
llegar esta única semana “deben ser muy concretas, específicas y razonables”
para tomar una decisión al respecto.
El funcionario guarda la esperanza de que cualquiera de las
propuestas pendientes por recibir esta semana asegure la viabilidad del
negocio, pues una liquidación tendría un impacto social grande. Pues eventualmente
también afectaría a unos 280 proveedores, buena parte de estos, emprendimientos
familiares y microempresas que surtían de mercancías las 1.320 tiendas de Justo
& Bueno que alcanzaron a operar en todo el país un par de años atrás. Hoy
se habla solo de unas 70, cuando a comienzos de año rondaban las 700.
También indicó que sería pagado todo lo que se adeuda desde
el 18 de enero de 2022 a la fecha en la que se tome una decisión definitiva,
incluidos en ese monto los cánones de arrendamiento y los servicios públicos, y
que la oferta de aporte de capital será presentada de manera formal cuando lo
determine la Superintendencia de Sociedades.
El anuncio de ese nuevo plan de salvamento fue recibido con
bastante reserva por un amplio grupo de propietarios de los locales en los que
funcionan las tiendas, algunos de quienes manifestaron que se trataba de lo
mismo de siempre, pues no se habla de una propuesta de fondo, con tiempos ni
compromisos respecto a las obligaciones pendientes, así como tampoco se
proporcionó el nombre del supuesto fondo o inversionistas que aportarían el
capital, del cual no se menciona el monto.
Fuente: Noticiasbq