“El programa ‘jóvenes en paz’ implicaba en ese momento 10.000
mil muchachos en peligro de criminalidad, o en la criminalidad, que en ese
momento en Bogotá era básicamente el hurto de celulares; podían cambiar por un
recurso del Estado esa actividad criminal y entrar a estudiar”, anotó.
El mandatario indicó que el programa implicaría un aumento en
el impacto de jóvenes, pasando de 10.000 que tenía proyectado en Bogotá a
100.000 menores a lo largo y ancho del país.
“A través de un cambio de recursos, lo cual nos llevaría a $1
billón para el año entrante, a cambio de no entrar o dejar de están en bandas y
entrar a estudiar o acabar de estudiar. Quizá tendríamos un motor para
disminuir la violencia y la tasa de homicidios en las zonas más violentas de
Colombia”, aseguró Gustavo Petro.