Es normal creer que tras el fallecimiento el cuerpo permanece inerte, lleno de quietud y serenidad; sin embargo los cadáveres experimentan una serie de cambios físicos que se dan en forma natural. Recopilamos algunos para que usted tenga claro qué pasará con su cuerpo cuando llegue el momento de dejar este mundo.
‘Crecimiento’ de uñas y pelo
Esto no ocurre literalmente. Lo que sucede es que se da un proceso de deshidratación que provoca que la piel se encoja y eso hace ver las uñas y pelo más largos.
De otro lado, las células de la piel continúan creciendo durante varios días, debido a que la dermis es capaz de seguir regenerándose usando la temperatura del cuerpo.
Se puede vivir sin corazón
El cerebro puede vivir sin el corazón por un rato, esto se da porque las células de esta parte del cuerpo comienzan a pelear entre sí por el poco oxígeno y nutrientes que quedan cuando la circulación sanguínea se interrumpe, logrando mantener el funcionamiento
del cerebro.
Las necesidades fisiológicas
En los minutos siguientes a la muerte, los músculos se relajan completamente y eso incluye a los esfínteres, provocando que la gente orine aunque esté muerta. También el cuerpo puede defecar debido a los gases que están acumulados en el tracto digestivo.
Funcionamiento del sistema digestivo
Las bacterias y parásitos que viven dentro del sistema digestivo, permiten que el organismo continúe trabajando después de morir. Por ello, también se cree que los muertos ‘hablan’, ya que los sonidos guturales que se crean por los gases provoca lo que parecen quejidos y gruñidos.
Erecciones post-mortem
Las erecciones solo suceden en casos de ahorcamientos, heridas en el cerebro por armas, muertes violentas por envenenamiento o si la muerte se dio boca abajo. Solo se presenta en estos casos debido a que se ejerce gran presión en el cerebelo.
Tener un hijo
Dar a luz después de la muerte se conoce como ‘nacimiento de ataúd’. La relajación de los músculos junto con el incremento de los gases internos, expulsan el feto de forma natural. En realidad, estos gases harán que se expulse cualquier cosa que esté dentro del cuerpo.
‘Crecimiento’ de uñas y pelo
Esto no ocurre literalmente. Lo que sucede es que se da un proceso de deshidratación que provoca que la piel se encoja y eso hace ver las uñas y pelo más largos.
De otro lado, las células de la piel continúan creciendo durante varios días, debido a que la dermis es capaz de seguir regenerándose usando la temperatura del cuerpo.
Se puede vivir sin corazón
El cerebro puede vivir sin el corazón por un rato, esto se da porque las células de esta parte del cuerpo comienzan a pelear entre sí por el poco oxígeno y nutrientes que quedan cuando la circulación sanguínea se interrumpe, logrando mantener el funcionamiento
del cerebro.
Las necesidades fisiológicas
En los minutos siguientes a la muerte, los músculos se relajan completamente y eso incluye a los esfínteres, provocando que la gente orine aunque esté muerta. También el cuerpo puede defecar debido a los gases que están acumulados en el tracto digestivo.
Funcionamiento del sistema digestivo
Las bacterias y parásitos que viven dentro del sistema digestivo, permiten que el organismo continúe trabajando después de morir. Por ello, también se cree que los muertos ‘hablan’, ya que los sonidos guturales que se crean por los gases provoca lo que parecen quejidos y gruñidos.
Erecciones post-mortem
Las erecciones solo suceden en casos de ahorcamientos, heridas en el cerebro por armas, muertes violentas por envenenamiento o si la muerte se dio boca abajo. Solo se presenta en estos casos debido a que se ejerce gran presión en el cerebelo.
Tener un hijo
Dar a luz después de la muerte se conoce como ‘nacimiento de ataúd’. La relajación de los músculos junto con el incremento de los gases internos, expulsan el feto de forma natural. En realidad, estos gases harán que se expulse cualquier cosa que esté dentro del cuerpo.