Poco a poco, el deporte ha
ido trayendo buenas noticias y nuevas glorias al país; medallas y
reconocimientos que son el producto de años de esfuerzo, dedicación y mucho
entrenamiento por parte de jóvenes quienes un día a pesar de su condición
económica se propusieron traer el oro para Colombia.
Y en el marco de los juegos
Olímpicos de Rio en Brasil, no podría faltar la cuota que representa al
departamento del Huila en el evento deportivo más importante del mundo; ellos
son EIDER ARÉVALO y ESTEBAN SOTO, dos huilenses que han recorrido países
llevando en alto nuestro tricolor y que van por un nuevo triunfo para un país
que le apuesta a la paz.
Dos niños, que crecieron entrenando
en pistas de atletismo en el municipio de Pitalito, con una historia que bien
podría hacer llorar a cualquiera. Tal y cómo lo relató su entrenador Eduar
Chilito Chilito, en el año 2003 en su proceso con las escuelas de formación
deportivas del municipio encontró en el barrio las Acacias a Eider Arévalo, un
niño con no mucho talento, pero sí con todas las ganas de ser un gran deportista,
“Eider no era un hombre de mucho talento en el deporte, pero era uno de
los más disciplinados “
indicó el entrenador quien con todo el orgullo del mundo, cuenta la historia de
estos dos ganadores.
Esteban Soto, era un niño con un gran talento y entusiasmo, sin embargo
sufría de asma y tenía varias recomendaciones médicas que le impedían
esforzarse demasiado; tal vez, dos deportistas con pocas posibilidades,
pensarían algunos, pero que han demostrado tener la destreza de romper
obstáculos y superar marcas.
En el año 2006, 40 deportistas laboyanos fueron llevados hasta la ciudad
de Neiva al campeonato departamental de atletismo en diferentes categorías,
Eider y Esteban participaron en la juvenil sub 15; Esteban ya era un marchista
en la prueba de 3000 metros y Eider aún era corredor. Esa, su primera prueba
constituyó el punto de partida para estos dos chicos; Esteban, quien era el
favorito quedó de segundo en la competencia siendo superado por el participante
del municipio de Villavieja, y Eider, quien no ganó ninguna medalla, pero que
vio la participación de su compañero y decidió
que desde ese momento entrenaría marcha.
A su llegada a Pitalito los dos jóvenes siguieron su entrenamiento, y en
pocos meses Eider superó la marca hasta de su propio compañero Esteban,
quedando campeón en marcha en el año 2007 en la final departamental
intercolegiados y Esteban como subcampeón; premios que le dieron la
clasificación a la final nacional a realizarse en el mismo año en la ciudad de
Medellín; sin embargo, sólo uno de ellos representaría al departamento, Eider
era el campeón, pero era inexperto y éste su primer competencia nacional, no
obstante, a sus 14 años logra quedar dentro de los tres mejores con una marca
de 15,05 minutos trayendo la medalla de Bronce, la primera para Pitalito y la
única que obtuvo la delegación deportiva departamental para el Huila en esa
oportunidad.
Para el año 2008, llegaron
nuevamente a los intercolegiados en Neiva, donde obtuvieron primero y segundo
lugar en la competencia y el pase de entrada a la final nacional en Cartagena;
por segundo año consecutivo sólo uno de los dos
competiría por el oro nacional,
sin embargo la situación se agudizó, Eider era campeón pero no tenía los
zapatos que necesitaba para competir, por algunos meses había trabajado con su
padre como albañil para poder comprar su calzado, sin embargo no eran los
adecuados y peor aún se los entregaron momentos antes de iniciar la
competencia, era el momento de tomar una decisión que debía ser Salomónica, uno
debía marchar y el otro correr; Eider participó con los zapatos de Esteban y
con zapatos prestados ganó la única medalla de oro que obtuvo el departamento para
ese año; la decisión del entrenador fue la correcta.
Eider clasifica a la final
internacional intecolegiados de juegos suramericanos a realizar ese año en la
ciudad de Santiago de Chile; quedó como campeón suramericano con una marca de
13,33 la mejor marca que había tenido hasta el momento. Esta fue la primera
medalla de oro en un suramericano que obtuvo el departamento del Huila, y por
supuesto Pitalito, con un hijo de sus entrañas, Eider Arévalo.
En el mismo año se presenta
al campeonato nacional afederado en Pereira, en donde queda campeón y gana un
espacio a nivel nacional, los deportistas y entrenadores voltearon su mirada a
este deportista y empizan a reconocerlo como uno de los mejores a nivel
nacional.
En 2009 pasa a la categoría
Juvenil, las pruebas pasaron de ser 3 a
10 kilómetros; un reto y una transición fuerte, su tiempo era de 52 minutos
mientras el campeón de la categoría tenía una marca de 48 minutos; Su primera prueba 10000 metros marcha fue en
Armenia en el nacional de afederados, rompió su propia marca terminando con
50,59 minutos llegando de tercero con una diferencia casi de 6 minutos.
Su entrenamiento empezó a
ser más riguroso, con el único pensamiento de mejorar su propia marca; Llega
hasta Puebla México, al campeonato centroamericano de intercolegiados, donde
ganó la prueba trayendo de nuevo un oro para Colombia.
Finalizando 2009 se radica en Bogotá, entrenaba de lunes a viernes, y los
fines de semana trabajaba como mesero, vivía en condiciones precarias, lo cual lo
llevó a pensar en retirarse, sin embargo su espíritu guerrero lo ha llevado
lejos.
En 2010, llegó a la copa de
marcha en Bogotá, Eider participó por la capital del país y el entrenador Eduar Chilito llevó desde
Pitalito a Esteban Soto al evento,
nuevamente compitiendo en los mismos escenarios, Eider en la categoría
sub 20 queda en segundo lugar, mientras
Esteban se presentó en la categoría sub 17 y quedó como campeón.
Ese mismo año Eider es
convocado a la selección Colombia al campeonato del mundo a realizarse en
Chiguagua Mexico en el mes de Mayo; él es el tercer clasificado en la categoría
juvenil (sub 20), rompiendo todos los pronósticos de los favoritos, rusos,
chinos, Estadounidenses y queda en primer lugar, convirtiéndose en el primer
campeón juvenil en Colombia. Después de esto, llega con miras a participar en
los primeros juegos olímpicos juvenil en Singapur donde fue el abanderado; llevó la bandera de
Colombia, en esta competencia fue descalificado faltando 2000 metros por
falencias técnicas en la marcha.
En el año 2011 Eider y Esteban
estaban radicados en Bogotá; nuevamente participaron
en la copa de marcha, donde quedan como
campeones, Esteban en la sub 17 y Eider en la sub 20, este año y después de
tanto esfuerzo logran posicionarse como futuros referentes en marcha a nivel
nacional. Empiezan a prepararse con miras a los campeonatos mundiales juveniles
a realizarse en el 2012, en los países de Rusia y España.
Llegan al mundial de marcha atlética en Rusia, donde
Eider y Esteban participaron como selección Colombia en la categoría juvenil en
la prueba de los 10 kilómetros la cual le dio un nuevo oro a Eider Arévalo; sin
embargo Esteban Soto fue descalificado por una intoxicación que presentó debido
a la inhalación del aroma de flores endémicas.
Eider clasificó al
campeonato mundial en pista a realizarse en Barcelona España donde quedó
campeón convirtiéndose nuevamente en el primer campeón mundial para Colombia en
esa categoría. En ese mismo año hizo el debut en los 20 kilómetros en EEUU
donde logró hacer la marca para los olímpicos de Londres.
Por primera vez Eider Arévalo
llega a los Olímpicos convirtiéndose en el participante más joven de la
selección Colombia y donde obtiene el puesto 20. Llega a Colombia y participa
en los juegos nacionales en Santander de Quilichao, donde quedó campeón en la
categoría de mayores.
En los siguientes años Eider
fue campeón suramericano Chile 2014, sub campeón centroamericano en México
2014, séptimo lugar en el campeonato mundial Beijín 2015, campeón del Challenger mundial en Portugal,
logrando realizar la marca exigida por la federación colombiana de atletismo
para clasificar a los Juegos de Rio.
Esteban Soto, fue campeón
panamericano ciudad de Guatemala 2013, campeón suramericano en Argentina 2013,
campeón suramericano sub 23 Uruguay 2014, y clasificó a Rio en el Challenger
2016 logrando la mejor marca de los clasificados por Colombia a los Juegos
olímpicos.
Y ahí están, en una entrada
triunfal llegaron a los juegos de Rio en Brasil 2016, un sueño hecho realidad,
no solamente de Eider y Esteban es el sueño de EDUAR CHILITO un joven de 33
años quien en muchas ocasiones utilizó hasta el dinero del mercado de su
familia por comprar los elementos necesarios de estos deportistas, un hombre humilde pero fuerte que formó dos campeones y
que hoy llora por sus glorias desde Rio, alentándolos para una nueva medalla a
nuestro país y a nuestro territorio Huilense.
TRES GRANDES DEL HUILA
Por Sirly Chimonja Córdoba