Autoridades en Caquetá suspendieron el servicio de
agua potable en los municipios de Solano y Curillo debido a que al menos 63
cuerpos de víctimas de la avalancha en Mocoa llegaron a las aguas del río.
El secretario de Gobierno del Caquetá, Édgar
Álvarez, manifestó que la situación es compleja y que tendrán que tomar otras
medidas para evitar problemas de salud en los habitantes de estas localidades.
“Los afluentes se encuentran contaminados y la
decisión de los mandatarios locales fue suspender el servicio de agua, toda vez
que se puede presentar algún tipo de enfermedad o brote de epidemias que puedan
alertar a las autoridades de salud del departamento del Caquetá”, indicó
Álvarez.
Por su parte el alcalde de Solano, Alejandro
Quintero, indicó que la contaminación del río Caquetá los obligó a suspender el
bombeo de agua en el municipio por lo que se están buscando otras medidas para
abastecer del líquido a los ciudadanos.
Entre tanto el alcalde de Solita, Justo Pastor
Martínez, aseveró que afortunadamente el pueblo se abastece de agua de la
quebrada Solita, por lo que no hay dificultades en el municipio pese a que han
encontrado cadáveres que han llegado por el río Caquetá desde Mocoa.