El ministro de Hacienda, Alberto
Carrasquilla, señaló que para armonizar los ingresos y gastos del país, así
como responder por las obligaciones y reactivar la economía, será necesario
aumentar el recaudo de impuestos y hacerlo mucho más equitativo.
Además de la ya conocida propuesta sobre renta,
Carrasquilla señaló que es
necesario debatir sobre la posibilidad de utilizar mecanismos de redistribución
del IVA a los más pobres e implementar medidas como gravar toda la canasta
básica familiar.
El ministro explicó que al evaluar el efecto
del Impuesto al Valor Agregado (IVA), se evidencia que son los colombianos
de mayores ingresos quienes obtienen los descuentos y exenciones más amplias
sobre este impuesto, constituyéndolo en otra fuente de desigualdad.
Sin embargo, el país cuenta ahora con bases de información y mecanismos tecnológicos
suficientes para que por primera vez en su historia, los colombianos de menores
ingresos paguen un IVA de 0% mediante mecanismos de devolución de recursos, que
saldrían del pago de IVA de las familias con mayores recursos.
Carrasquilla señaló que este será un debate
“interesante”, que el país tendrá que dar.
De acuerdo con el ministro, un estudio de 2013 que
tiene como base el consumo de los hogares colombianos, los precios y la tasa de
IVA muestra cómo a los hogares más pobres del país se ahorran $18.000 el pago
del impuesto si toda la canasta estuviera gravada, mientras que los
hogares de más ingresos se ahorrarían $278.000.
En ese sentido, el ministro agregó que “tiene todo la lógica decir por qué no gravo
toda la canasta y le devuelvo a los hogares del decil 1 $18.000 y a los del
decil 2 $27.000 y saco los recursos de los dineros que están pagando los
hogares del decil 10”.
Los hogares de los deciles 1 y 2 son los de menores
ingresos, mientras que los del decil 10 son aquellos con más ingresos.
Sin embargo, el IVA siempre ha sido un tema que
genera gran polémica para el país. Durante el gobierno del expresidente Uribe
Vélez la tarifa general de este impuesto aumentó hasta el 16% y con la reforma
tributaria de 2016 aumentó a 19%.
Pero nunca se ha gravado por completo al
reconocer la regresividad de este impuesto que antes contaba con pocos
mecanismos de devolución para los hogares de menores ingresos.