El sacerdote Fausto Coronel Riveros y el seminarista Evelio Ortiz
Macías, quienes oficiaban en la iglesia católica Nuestra Señora de los Dolores
del barrio Ciudad Porfía, en Villavicencio ,
fueron condenados por el delito de acceso carnal abusivo con un menor de 14
años.
Los dos condenados aceptaron los cargos en diferentes etapas del proceso
judicial. El párroco deberá pagar 16 años y 2 meses de cárcel, mientras que la
sentencia contra el seminarista es de 12 años y 6 meses en prisión.
Al niño, que llevaba tres años de monaguillo de la iglesia en el populoso barrio de la capital del Meta, lo abusaron sexualmente en diciembre pasado cuando fue a ver televisión en la sala de la iglesia donde se encontraba el seminarista luego de dictar clases de catequesis a los menores del sector.
Tras el abuso, el niño le contó a su papá del arbitrario acto realizado por el seminarista y de por lo menos otros cinco que había padecido por parte del sacerdote, quien viajó a Roma luego de la visita del papa Francisco a Villavicencio.
El progenitor del menor de inmediato puso la denuncia contra los dos
religiosos ante la Fiscalía Delegada ante el Centro de Atención Integral a las
Víctimas de Violencia Sexual (Caivas). Al ser llamados a responder por esos
hechos, el acusado sacerdote Fausto Coronel Riveros aceptó los cargos, lo que
llevó al Juzgado 3o Penal del Circuito a dictar sentencia en su contra, el
pasado 20 de septiembre, consistente en 16 años y 2 meses de prisión.
El seminarista no aceptó los cargos y fue detenido el 5 de abril de 2018 por orden judicial y presentado para imputación de cargos, por la Fiscalía Seccional segunda adscrita al Caivas.
Días después, el seminarista también aceptó los cargos y luego de firmar preacuerdo con la Fiscalía el Juzgado Segundo Penal del Circuito lo condenó, el pasado viernes, a una pena de 12 años y 6 meses de prisión, por los delitos de acceso carnal abusivo con menor de 14 años agravado en concurso homogéneo y sucesivo.
El seminarista no aceptó los cargos y fue detenido el 5 de abril de 2018 por orden judicial y presentado para imputación de cargos, por la Fiscalía Seccional segunda adscrita al Caivas.
Días después, el seminarista también aceptó los cargos y luego de firmar preacuerdo con la Fiscalía el Juzgado Segundo Penal del Circuito lo condenó, el pasado viernes, a una pena de 12 años y 6 meses de prisión, por los delitos de acceso carnal abusivo con menor de 14 años agravado en concurso homogéneo y sucesivo.