En las diferentes canchas de fútbol públicas de Pitalito Huila, se realizan
campeonatos o encuentros informales deportivos, tiempo y espacio que debería
ser para el sano esparcimiento y la mayoría así lo hacen, sin embargo, en campos
como el de La Pradera, al occidente de la ciudad la comunidad manifiesta que
los partidos lamentablemente son excusa de algunos observadores y jugadores para “trabarse”.
Lo anterior es perfectamente corroborable, ya que solo basta pasar por las
cuadras aledañas a la cancha para percibir el olor intenso de la marihuana que
invade también los hogares donde residen niños; esta denuncia se hace teniendo
en cuenta que esta semana el nuevo presidente firmó el decreto de prohibición
de la dosis mínima y en el sector no hay presencia de autoridades para imponer
los respectivos comparendos del código de policía, sin embargo tras los llamados de la comunidad los patrulleros hacen las rondas respectivas de control.
Este mismo panorama se observa en otros espacios de la ciudad, un ejemplo
de unión de la comunidad lo dieron en el barrio Los Andes, donde los vecinos salieron
a patrullar en las noche para “espantar” a los consumidores del polideportivo y
el gimnasio biosaludable.