Una mujer, de 24 años fue capturada, por
golpear a su hijo que hizo popo en el pañal. La joven madre debe responder por
el delito de violencia intrafamiliar. El niño ya se encuentra bajo
protección del ICBF.
Leidy Tatiana Martínez
Osorio, madre del niño, capturada por violencia intrafamiliar.
Con casa por cárcel
terminó una mujer que golpeó violentamente a su hijo de 21 meses de nacido,
porque se hizo popo en el pañal, en el barrio Nueva Granada, suroriente de
Neiva.
Fue la misma abuela de
la menor víctima, quien alertó a uniformados de la Policía Metropolitana de
Neiva (Menev), de la agresión física que la mujer estaba cometiendo contra el
niño, en hechos ocurridos en una vivienda ubicada sobre la Calle 2B bis con
Carrera 28.
Se trata de Leidy
Tatiana Martínez Osorio, de 24 años, a quien la Fiscalía le imputó el delito de
violencia intrafamiliar, “toda vez que causa una lesión a su hijo de 21 meses
de edad”, dijo el coronel Nelson Quiñones Manchola, comandante de la Menev.
Leidy Tatiana, al
momento de la captura se encontraba muy exaltada en aparente estado de
embriaguez.
En manos del ICBF
El niño presentaba
varios hematomas en el cuerpo, por lo que fue trasladado a la ESE Carmen Emilia
Ospina con sede en Granjas y fue remitido al Hospital Universitario de Neiva.
“Por fortuna las lesiones no son de consideración”, indicó el coronel Quiñones.
Según las autoridades,
el niño porque se hizo ‘popo’ en el pañal, lo que habría desencadenado la ira
de la mujer.
Leidy Tatiana, fue
presentada ante un Juez de Control de Garantías, por el delito de violencia
intrafamiliar, que ordenó la medida de aseguramiento en su domicilio. Entre
tanto el menor quedó bajo protección del Instituto Colombiano de Bienestar
Familiar ICBF, para adelantar el proceso de restablecimiento de derechos.
Finalmente, el
Comandante de la Policía Metropolitana de Neiva, dijo que “es de reconocer el
trabajo de la comunidad, en este caso la misma familia que informó de la
situación que se estaba presentando. El llamado que hacemos a los ciudadanos,
es para que estén muy pendientes de nuestro niños, niñas y adolescentes, que no
sean víctimas de violencia”.
Tomado de La nación