Óscar Hernando Zapata recibió doce heridas que le comprometieron el
corazón y el pulmón. Su esposa narró cómo sucedieron los hechos.
“Lo que hicimos fue traer a un grupo de venezolanos en septiembre. En
noviembre, uno de ellos presentó signos de agresividad. Mi esposo le dijo que
se tenía que ir porque no podía vivir aquí con esas actitudes. Él se fue, hace
un mes regresó, nos pidió perdón y dijo que quería seguirse congregando en la
iglesia", dice Rosa Delia García, pareja de la víctima, sobre lo
sucedido en la localidad de Fontibón.
Y agrega que "el día de los hechos nos llamó, que nos
quería hacer un almuerzo de agradecimiento, y efectivamente lo hizo. Nos
quedamos los tres. De pronto timbraron, llegó una persona preguntando por mi
esposo, lo llamé que lo necesitaban, vino a abrir la puerta. Yo estaba en
la cocina y escuché los gritos. Cuando salí, lo estaban agrediendo, lo tenían
en el piso apuñalándolo”.
Debido a la gravedad de las heridas, Zapata falleció el pasado sábado en
la Clínica de Occidente de Bogotá.
Las autoridades revisan cámaras de seguridad del sector para dar con los
responsables.