En el mundo de cada diez empleos, uno
es producido por el turismo; esto, significa que se ha convertido en una
oportunidad de los territorios que tienen este potencial.
Pitalito, y la región sur del
departamento del Huila, constituyen un verdadero reto que debe asumirse desde
los entes administrativos y por quienes han hecho de su oficio un verdadero
arte para mostrar a foráneos y turistas de talla mundial.
Los artesanos, ceramistas, pintores,
escultores, músicos que relatan la historia de una comunidad ancestral y
arqueológica merecen ser un foco de atención en la formulación de una
estrategia que genere una alternativa de comercio a través del turismo en
Pitalito.
La mayoría de viajeros llega a
Pitalito y solo conoce de este municipio, la terminal de transportes o el
aeropuerto, y su ruta sigue hacia la capital Arqueológica, porque no se ha
generado una estrategia comercial que incentive y genere una necesidad de conocer
los productos y atractivos de este municipio.
El equipo de trabajo liderado por el
empresario José Ader Castro, en aras de generar una propuesta real, eficiente y
realizable frente el tema de turismo en Pitalito, ha realizado una
investigación que les ha permitido detectar las principales falencias y los
retos que se deben asumir en el municipio para crear sobre el potencial
turístico una oferta efectiva de servicio al visitante.
“Pitalito produce el mejor café del
país, tiene fincas donde se puede enseñar el proceso y el día a día del
caficultor, tenemos la escuela nacional de café, la denominación de origen de
la chiva, y los mejores ceramistas con una trayectoria de más de 100 años como
es el caso del maestro Pablo Vargas Muñoz, la emblemática laguna de Guaitipan,
una gastronomía exquisita con el auge de una producción limpia y saludable, un
clima que favorece la práctica de deportes atractivos como ciclo montañismo y running, se está generando una cultura de
conservación del ambiente para generar espacios de avistamiento de aves, es
decir, tenemos toda la oferta para un turista, lo que hace falta es lograr la
articulación, planificación y puesta en marcha de un plan de trabajo en aras de
apalancar el turismo en el municipio” manifestó Castro Pizo.
El empresario, ve en el turismo una
oportunidad de aportar a la construcción del tejido social, de mejorar los
ingresos de los laboyanos generando una vida digna en el municipio, de
cambiarle la cara y la imagen a la segunda ciudad más importante del
departamento, al tiempo que se genera una economía estable que no dependa en su
mayoría en la cosecha de café.