El menor murió como consecuencia de un daño
cerebral causado por el fuerte golpe.
Anthony Trice, un joven padre en Kentucky,
Estados Unidos, fue acusado por las autoridades de ese país de haber asesinado
a su hijo con un puñetazo después de perder en una partida de videojuegos.
Según la policía del lugar, el hombre le dio
un fuerte golpe en la cabeza al bebé, enfurecido por no poder ganar en un
videojuego. Además, para consolar el llanto del menor, el padre intentó
llevarlo a la cocina para alimentarlo, pero en el camino lo dejó caer al suelo.
Tryce, sentó al bebé y le dio un biberón para
calmarlo, pero al poco tiempo se dio cuenta que el menor no reaccionaba. Fue
entonces cuando vio la gravedad del asunto y llamó al 911 para pedir ayuda.
El
menor fue internado en un hospital, pero murió dos días después como
consecuencia de daños cerebrales.
Las autoridades de Kentucky acusaron a Trice
de homicidio y abuso de menores.