La “bebé milagro” que sorprendió a
América Latina, bautizada con el nombre de Victoria, aumentó de peso y comenzó
a recibir leche de fórmula. Su padrino, Erwin Bazán Gutiérrez, cuenta a Aleteia
más detalles del caso.
“La doctora me permitió tocarla y la
verdad es que es una sensación única, tomar su pequeña mano y darte cuenta que
estás frente al milagro de la vida”.
Estas palabras corresponden a Erwin
Bazán Gutiérrez, el padrino de bautismo de Victoria, la bebé boliviana que se transformó en noticia
a nivel internacional luego de sobrevivir a una interrupción Legal del Embarazo
(ILE) con 26 semanas de gestación.
Luego de esto -y tras haber sido
bautizada de emergencia en el hospital en donde se desarrolló su complejo caso,
sitio donde permanecía en cuidados intensivos desde una primera instancia-,
Erwin había señalado a Aleteiaque “las próximas semanas
serían claves en la vida de la pequeña Victoria”.
Y así fue. Según confirmó
recientemente Erwin a Aleteia, “Victoria va para adelante” y
comenzó a subir de peso (actualmente en 1 kilo 300 gramos).
“No ha tenido complicaciones en su
cuadro de salud. Lo que más se cuida es que no se vayan a presentar infecciones
que podrían desestabilizarla. Pero afortunadamente su cuadro es estable”,
expresó Erwin.
Ha comenzado a recibir leche de
fórmula en pequeñas cantidades a través de sonda oral. Sin embargo, sigue con
respiración artificial”, prosiguió.
“La verdad es que tenemos mucha
expectativa que pronto pueda comenzar a respirar por sus propios medios”,
agregó, Erwin.
La madre de 14 años, el otro drama de
fondo
Detrás del milagro de Victoria
aparece el caso de su madre, una adolescente de 14 años víctima de una
violación, algo que la llevó a rechazar el embarazo, con el apoyo de su
familia. La joven madre permanecía en estado de shock, pero su situación nunca
fue olvidada, pues desde un primer momento a nivel de Iglesia en Bolivia se
ofreció “mano tendida” para darle contención, tal cual ya publicó Aleteia. Ver
nota a continuación:
En ese sentido, Erwin recodó que
actualmente su madre sigue recibiendo asistencia profesional en su domicilio.
“Tanto de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia, pero también a través de
una profesional del Servicio de Orientación Familiar (SOF), dependiente de la
Iglesia católica”, comentó.
Sigamos rezando por la pequeña
Victoria para que pronto pueda comenzar por sus propios medios, siga
recuperándose, saliendo de la maternidad e ingresando a un hogar. En
definitiva, que Victoria se siga convirtiendo en testimonio viviente de que en
medio de las situaciones humanas más complejas –que merecen respaldo y apoyo-
hay alternativas al aborto.
Cinco historias de menores que
impactan (hacer click en galería):