Un enfermero
indonesio fue arrestado por tener sexo con un paciente con covid-19 en el
hospital de emergencias Wisma Atlet (Yakarta), donde el primero trabajaba y el
segundo se estaba recuperando.
El encuentro
sexual fue dado a conocer el 25 de diciembre de 2020 por el mismo paciente,
quien publicó en su cuenta de Twitter (@bottialter) una captura de pantalla de
la conversación de WhatsApp en la que él y el profesional de la salud acordaron
encontrarse en el baño del hospital.
Además,
mostró una fotografía tomada durante el encuentro, aparentemente después de
tener sexo.
En la imagen
se ve el uniforme del enfermero en el suelo y una bola de papel arrugada.
Luego de que
la publicación se hiciera viral, @bottialter puso su cuenta privada, pero se
defendió asegurando que no tenía coronavirus. “¿Cómo puedo contagiar a alguien
si soy negativo?”, escribió.
Sin embargo,
la Asociación Nacional de Enfermeros de Indonesia ya se había percatado del
caso. “Nuestra posición es que el enfermero debe afrontar un proceso legal”,
expresó la institución en un comunicado público.
Tras el
incidente el Comando Regional Militar determinó la identidad de los dos hombres
y procedió a detenerlos.
Las
autoridades les realizaron pruebas PCR de coronavirus. En efecto, el paciente
sí tenía el virus. El enfermero, por su parte, dio negativo.
Al enfermo
se le permitió volver al hospital para seguir recuperándose.
El
enfermero, sin embargo, fue trasladado a la Policía Central de Yakarta y fue
detenido para ser interrogado.
Según
conoció el diario ‘The Sun’, las autoridades podrían presentar cargos asociados
a contenido pornográfico, aun cuando la publicación de @bottialter no contuvo
contenido explícito más allá de los pantallazos con conversaciones libidinosas.
De ser
encontrados culpables los hombres podrían ser sentenciados hasta a diez años de
prisión.
La
Organización Mundial de la Salud reporta que Indonesia tiene casi 780.000 casos
de coronavirus confirmados desde el inicio de la pandemia y un poco más de
23.000 muertes. Eso lo convierte en el vigésimo país con más positivos del
mundo y en el decimoséptimo con más muertes.
Fuente: EL
TIEMPO