Según dijo el viceministro Londoño, en un foro que organizó
ProBogotá sobre la reforma tributaria, los programas sociales que benefician a
las familias más vulnerables del país le cuestan al Estado “cerca de 11
billones de pesos al año”, razón por la que sin una reforma tributaria no
habría como mantenerlos.
“Si no hacemos esta reforma social, lo que estamos
diciéndoles es que a partir de junio los 3 millones de hogares que reciben
Ingreso Solidario no lo van a recibir. Y les estamos diciendo a los de los
programas de familias en acción, que les vamos a reducir los ingresos a la
mitad”, advirtió Londoño.
El viceministro de Hacienda insistió en que a todas las
familias que reciben el beneficio de 160 mil pesos mensuales ya no les llegará,
y dejó una pregunta sobre la mesa para abrir el debate.
“¿Vamos a abandonar a esos 6 millones de hogares colombianos
a los que les estamos llegando con los programas sociales? […] si decimos que
no, perfecto, Colombia decidió no apoyar a sus vulnerables, pero nuestra
responsabilidad como Estado es seguirlos apoyando porque las condiciones de
vulnerabilidad no les van a pasar mañana”, dijo.
Londoño fue reiterativo en que el país necesita de esos
recursos que ya se invirtieron durante la crisis más fuerte por cuenta de la
pandemia, y dijo que para mantener los programas sociales el dinero “tiene que
salir de los colombianos que estamos en mejores condiciones”.
Al final, el funcionario aseguró que esa “reforma social”
busca recuperar “la senda de empleabilidad y reducción de pobreza extrema”, y
aseguró que la otra preocupación del Gobierno tiene que ver “con pagar el hueco
que quedó de unos 100 billones de pesos, mal contados, que representa el haber
tenido que atender la pandemia”.
Estas fueron las declaraciones que entregó Londoño durante el
foro, en donde hizo un breve recuento de todos los recursos que invirtió el
Gobierno y a qué sectores los destinó.