El
Juzgado Décimo Administrativo Mixto de Oralidad del Circuito de Popayán ordenó
al comandante de la Policía Metropolitana de Popayán, coronel, Boris Alberto
Albor, "garantizar que los miembros de la policía bajo su mando, se
abstendrán de usar elementos letales en la intervención de protestas,
respetando el derecho a la vida y la integridad personal y los derechos humanos
tanto de los marchantes como no marchantes".
En
el fallo emitido, la juez de la República además indicó, que en el evento que
ocurran alteraciones del orden público y se deba utilizar la fuerza, los
miembros de la Policía deberán aplicar "principios de proporcionalidad,
necesidad, razonabilidad y legalidad, tal y como lo prevén las normas
internacionales y nacionales".
De
acuerdo con el juzgado, los uniformados de la ciudad deberán aplicar la fuerza
de manera focalizada y no "sobre la multitud, identificando quiénes son
los causantes de los desórdenes o actos vandálicos dentro de las
manifestaciones, y publicará los nombres completos con cédula en aras de que no
se deslegitime la manifestación pacífica".
En
el mismo sentido, el fallo conminó a capacitar a los miembros de la Policía
Metropolitana de Popayán y el Esmad, en ética y derechos humanos. "Para
que actúen como agentes de paz y garanticen el derecho a la vida e integridad
personal de los marchantes y no marchantes y así evitar el uso desproporcionado
de las armas durante las manifestaciones pacíficas en la ciudad de
Popayán".
La
instrucción de la juez es que el comandante de la Policía Metropolitana de la capital
del Cauca, debe garantizar que los efectivos, en el caso de hacer uso de la
fuerza, "lo hagan de manera planeada, limitada y proporcional a la
agresión, de manera focalizada y no de manera indiscriminada sobre todas las
personas que hagan parte de una protesta pacífica, siempre velando por la
garantía de los derechos humanos y fundamentales de los ciudadanos".