Una
agente de la Policía Nacional, denuncia que en hechos vandálicos contra el CAI
en el que estaba, fue víctima de lesiones y agresiones sexuales.
La
patrullera cuenta que estaba cumpliendo su labor en el oriente de Cali, cuando
sobre las 10:00 de la mañana del jueves 29 de abril, quedó en medio de un
enfrentamiento entre manifestantes y el Esmad, y minutos después varias
personas lograron tomarse el CAI de la Policía.
“La
gente con rencor en sus ojos golpeaba el CAI con piedras, lo incineraban. En
cuestión de segundos los manifestantes ingresaron, rompieron vidrios, forzaron
la puerta, abrieron y preguntaban por las llaves de las esposas para liberar a
los capturados”, señaló.
Ella
se refiere a los cinco detenidos que ella y dos de sus compañeros estaban
custodiando en ese momento. Luego, manifiesta que comenzaron a agredirla.
“Me
sacaron arrastrándome, yo rogaba por mi vida. Me sostenía de todo lado. Me
sostuve del marco de la puerta, pero fue inútil; eran muchos. Me tumbaron al
piso al lado derecho del CAI y sin piedad comenzaron a golpearme, a insultarme;
empezaron a despojarme de todas mis pertenencias”, expresó la patrullera.
“Uno
de ellos se me sube encima, me despoja de mi guerrera (de mi uniforme). Esa
persona que se encontraba encima mío me empezó a tocar por todo mi cuerpo,
empezó a golpearme, empezó a besarme, a tocar mis partes íntimas. Las personas
que me tenían de pies y manos me seguían golpeando por donde cayera el golpe.
Uno de ellos se acerca al que estaba encima y le pasa mi tonfa (bastón)
diciéndole: ‘Métale esto'”.
Además,
confesó que en ese momento solo pudo pensar en su mamá: “Se me pasa por la
cabeza que por cuestiones de tiempo no pude hablar con mi mamá, decirle cuánto
la amaba. Pero yo seguía en pie, suplicaba por mi vida para que no me hicieran
nada y les decía que se llevaran todo”.
La
agente manifiesta que logró escaparse y corrió hacia un vehículo que pasaba por
allí. El conductor la ayudó y la dejó subirse para llevarla a un centro médico
pese a que le seguían lanzando piedras.
"La
persona sin pensarlo abrió la puerta y me dijo súbase, yo me subí, le lanzaron
piedras. Estoy muy agradecida por seguir viva", aseguró.
El director de la Policía Nacional, el general Jorge Luis Vargas, señaló que la institución brinda el acompañamiento a la patrullera en su recuperación física y emocional, y puntualizó que dio instrucciones para encontrar a los responsables y que sobre ellos caiga todo el peso de la justicia.
"Esperamos
que esta valiente mujer de nuestra Policía nos acompañe por mucho tiempo para
servir a los colombianos y especialmente a los jóvenes de nuestro país",
señaló el director de la Policía Nacional.
Esta
patrullera espera recuperarse pronto para volver al trabajo, asegura que
nació para servir a la comunidad.