En el marco de un aumento descontrolado en los precios y un
crecimiento exponencial del hambre y la desnutrición, la dictadura norcoreana
exigió regular la ingesta de comida
Desde el régimen de Corea del Norte le pidieron a la
población que “reduzca la cantidad de comida que come” al menos hasta 2025, el
año en el que reabrirán las fronteras comerciales con China. Esto se debe a que
los norcoreanos están sufriendo niveles de hambre como pocas veces han padecido
debido a la escasez de comida producto del cierre de fronteras con el gigante
asiático en un intento de frenar la propagación del coronavirus y a las
erráticas políticas económicas que se destinan más al desarrollo armamentístico
que a la vida doméstica.
Si bien la apertura comercial con China es vital para la
recuperación económica del país -que sufre una importante recesión desde
principios de 2020-, las autoridades afirman que las chances de que esto suceda
antes de 2025 son muy pocas, según la emisora de radioFree Asia (RFA). Sin
embargo, los ciudadanos denuncian que la situación es de extrema gravedad y que
es impensable llegar al 2025 en estas condiciones. Es más, muchas familias
temen no contar con los recursos necesarios para superar el invierno.
“La situación alimentaria en este momento es ya claramente
una emergencia, y la gente está luchando contra la escasez. Cuando las
autoridades les dicen que tienen que conservar y consumir menos alimentos hasta
2025... no pueden hacer otra cosa que sentir una gran desesperación”, dijo una
fuente a RFA que pidió mantenerse bajo anonimato por razones de seguridad.
“Algunos de los residentes dicen que la situación actual es tan grave que no
saben si podrán sobrevivir al próximo invierno. Dicen que decirnos que
aguantemos las penurias hasta 2025 es lo mismo que decirnos que nos muramos de
hambre”, dijo la misma fuente
El escenario prepandémico del país ya era extremadamente
delicado, con un 40% de su población -alrededor de 10,5 millones de personas-
estando bajo la condición de desnutrición y un 70% del país dependiendo de
ayuda alimentaria, según un informe de las Naciones Unidas.