Las acciones extorsivas de las que venía siendo víctima un
consorcio de obras civiles en el Huila, condujo al Gaula Militar de la Novena
Brigada, en un trabajo coordinado con el
CTI de la Fiscalía, a planear y ejecutar una operación antiextorsión que
concluyó con la muerte de los dos presuntos delincuentes y la recuperación del
dinero exigido.
La operación inició a principios del mes de agosto cuando la
unidad militar recibió la denuncia. Según las víctimas, mediante llamadas
telefónicas, un sujeto que se identificaba con el alias de ‘Camilo’, presunto
integrante del frente ‘Manuel Vásquez Castaño’ del ELN, les exigían 1.000
millones de pesos a cambio de permitirles continuar con la obra, no quemar la
maquinaria y respetar la vida de los empleados.
Las personas extorsionadas negociaron con sus victimarios,
llegando a un acuerdo de un pago de 500 millones de pesos que serían cancelados
en dos contados de a 250 millones, teniendo tan solo dos semanas para ello.
El primer pago debía hacerse el 30 de agosto. A lo largo del
día los dueños del consorcio recibieron varias llamadas en las que les daban
instrucciones del sitio donde debía ser entregada la cuantiosa suma. El temor
por la posible acción de la Fuerza Pública, hizo que cambiaran el sitio de
entrega en tres ocasiones.
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Sin embargo, las continuas labores de inteligencia y
planeamiento, llevaron a la unidad a lograr el factor sorpresa, el mismo que
condujo a uno de los sujetos a desenfundar su arma contra las unidades
militares finalizándose con la neutralización de los dos hombres encargados de
recoger el dinero.
Durante la operación y las labores judiciales por parte del
CTI, se logró la incautación de una motocicleta y de un arma corta, elementos
que hacen parte del acervo probatorio.
Los soldados de la Novena Brigada mantienen un accionar
permanente, enfrentando los factores de inestabilidad que con su actuar
extorsivo y de secuestro, pretenden fortalecer su finanzas para continuar con
sus actividades delictivas.